Ya desapareció el espejismo de que el tipo de cambio se iba a estabilizar y de que se impondrían mayores controles en el gasto público, al restablecerse el acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI), afirmó el empresario César Nicolás Penson.

Una muestra de eso, añadió, es que el dólar continúa por encima de los RD$50 por US$1, afectando todos los componentes del aparato productivo y los precios de todos los productos.

Según Penson, ex presidente de la Asociación de Empresas Industriales de Herrera, la situación económica actual del país es horrible, pero más que eso, cree que la desesperanza y falta de idea de hacia dónde van los dominicanos, da la impresión de un barco a la deriva.

«La economía dominicana ha estado viviendo una situación desastrosa, a la que no se le ve solución a corto plazo», comentó Penson entrevistado por el periódico HOY.

Agregó que hasta el espejismo de que la firma con el FMI y el dinero que entraría por ese concepto, incidirían en la reducción de la tasa del dólar, a su juicio, se ha desvanecido.

«Nos damos cuenta de que estamos en manos de la especulación. Es una especulación rampante, empujada por la sensación de que no hay gobierno y precisamente en esa situación de desesperanza es que se encuentran productores y compradores», dijo.

Añadió que todos los ciudadanos se han empobrecido dramáticamente, que hay un desorden político, un caos económico y el país totalmente se ha convertido en un desorden en todo los sentidos.

“No somos los empresarios que pensamos así, es el público en general, porque todo depende de que haya una economía sana, pero en las condiciones actuales es imposible», sentenció Penson.

Agregó que todos los mercados se han caído, porque si bien las ventas bajaron, también las compras por parte de las empresas a sus suplidores, por efecto de la suspensión del crédito, tanto nacional como internacional.

«Se ha destruido todo lo que se había hecho en años atrás con relación al crédito internacional y la verdad es que esa situación nos afecta terriblemente, porque esa falta de crédito obliga también a tener más pesos, porque hay que comprar de contado», dijo.

Indicó que los activos de las empresas no les permiten continuar endeudándose con los bancos, porque además esas entidades les han puesto una serie de restricciones, por efecto de los riesgos que representan como clientes.

Entre esas restricciones figura que dependiendo de cómo se pague, se cae en una serie de normas como son la aplicación de tasas más altas.

«La cantidad de pesos que hacen falta hoy para comprar dólares es infinita, con relación a lo que era ayer y los valores y activos de las empresas no están actualizados en ese sentido”, dijo.

En cuanto a las ventas en dólares por parte de algunas empresas nacionales, Penson reconoció que algunos negocios tienen problemas al pagar, por la inestabilidad en la tasa.

«Yo puedo tener toda la intención de vender en dólares, pero el que compra: ¿Tiene la capacidad para comprarme en dólares?. Este es el país del absurdo, donde queremos dolarizar la economía para una cosa, pero para otra no», sostuvo.

Se informó que algunas empresas han tenido problemas al momento de pagar facturas que compraron en dólares, porque la inestabilidad del tipo de cambio les impide cumplir con los compromisos establecidos.