El reverendo Rubén Concepción afirmó que al celebrar sus 50 años de fundación, el  Movimiento Misionero Mundial tiene como prioridad que la Iglesia Pentecostal del siglo XXI sea un ente que sirva para mejorar la conducta de la sociedad. Dijo que los jóvenes de este siglo tienen cientos de oportunidades de futuro y superación personal, pero son víctimas de antivalores que observan en figuras, sus ídolos de la música, la actuación y la televisión, deteriorando su  vida y  alejándose del norte de Jesucristo. 

Concepción, quien es uno de los nueve directores internacionales del Movimiento fundado en Puerto Rico por el reverendo Luis Ortiz, manifestó que  “la Iglesia necesitaría el medio, que son las comunicaciones, para contrarrestar toda noticia negativa que reciben los jóvenes”. Además puntualizó que la diferencia generacional entre padres e hijos abre un abismo muy grande que solo se puede cerrar en la medida que los jóvenes comprenden el evangelio de Jesucristo y lo aplican en su vida diaria.

“Nosotros creemos que hay medios o formas de llevar el evangelio a la generación moderna y alejarlos de la música que los incita a la violencia, es que los padres aprendan a comunicar no a imponerse y además a ser un modelo a seguir, porque los jóvenes se basan en lo que ven y emulan conductas”, precisó, al tiempo que instó a los padres a amar a Dios, a su prójimo y vivir acorde a la palabra para que eso copien sus hijos.