El presidente del Consejo Nacional de Iglesias Pentecostales, Nelson Luna, demandó del Gobierno enfocarse más en la lucha contra las drogas en las escuelas públicas, los colegios privados y las universidades, tras afirmar que niños son usados como mulas y mujeres utilizan sus cuerpos para el tráfico de sustancias ilegales, como heroína y cocaína.

Expresó que más de 10 mil deportados de Estados Unidos han llegado al país en los últimos cinco años, de los que indica, que muchos estuvieron envueltos en droga y al venir a la República Dominicana se involucran en casos de violencia.

Atribuye a algunos de los deportados cometer agresiones contra las mujeres y en hechos de droga. Deploró que más de 300 mujeres sean asesinadas por sus parejas este año.

En cuanto a las drogas, el ministro religioso precisó que la sociedad demanda cambios en las políticas públicas de los gobiernos, ya que la droga está acabando con la juventud.

“La sociedad demanda de una política pública sobre el tráfico y consumo de drogas, que se refuerce más el trabajo que realiza la Dirección Nacional de Control de Drogas y crear conciencia con programas en las escuelas públicas y privadas”, manifestó.

Luna, un investigador del problema de las drogas y miembro de la Federación Nacional de Lucha Contra las Drogas (Fedeluc), precisó que Naciones Unidas ha invocado el derecho a despenalizar el consumo de las drogas, lo que a su juicio responde a que el organismo está mal asesorado.

Advierte de salud. El religioso Luna hizo sus cálculos y considera que la despenalización de la droga implicaría construir más de 50 mil hospitales a nivel mundial para tratar a los adictos. Además agrega que desaparecería la Agencia Antidroga de Estados Unidos (DEA en inglés), así como muchas otras agencias a nivel de Latinoamérica.

Resaltó la labor que desempeña Fedeluc en la lucha contra las drogas y el temor que persiste en la sociedad en sentido general. Luna fue uno de los expositores en el seminario “Drogadicción y Violencia de Género”, organizado por Fedeluc en la biblioteca Manuel del Cabral de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD).