Tras un allanamiento que se prolongó por más de siete horas, representantes del Ministerio Público sacaron de las oficinas de la constructora Odebrecht decenas de cajas y servidores de computadoras que fueron trasladados en cuatro camionetas y una yipeta custodiadas por un contingente policial y agentes “Swat” en una caravana por la avenida Pedro Henríquez Ureña, en La Esperilla, en la que también iban los fiscales.
La Procuraduría Especializada en Persecución de la Corrupción Administrativa (Pepca) allanó las oficinas de la constructora Odebrecht en el noveno piso de la torre Diandy XIX, alrededor de las 3:00 de la tarde de ayer, proceso que se prolongó hasta las 10:20 p.m cuando empezaron a montar los servidores en los vehículos.
Alrededor de la 9:00 p.m. se vio salir sigilosamente del edificio a Laura Guerrero, titular de la PEPCA. Luego alrededor de las 10:00 p.m salió el abogado Robert Valdez, representante de la empresa Odebrecht en el país, Marcelo Hofke, quien tampoco ofreció declaraciones a la prensa.
El allanamiento es parte de las investigaciones por sobornos que el gerente de la empresa en Brasil, Marcelo Odebrecht admitió haber pagado a funcionarios para obtener contratos.
El desplazamiento de los representantes del Ministerio Público se produjo alrededor de las 3:00 p.m, cuando varias unidades de “Swat”, junto al procurador fiscal Wagner Cubilete, salieron de la Procuraduría General de la República en el Centro de los Héroes, hacia la torre Diandy XIX, de la avenida Pedro Henríquez Ureña, donde están las oficinas de la empresa brasileña.
Representantes del Ministerio Público informaron que acción se da luego de que se confrontaran las informaciones recibidas por el representante de la empresa en el país, Marcelo Hofke, y las obtenidas a través de labores de inteligencia que venían realizando.
Informaron que se busca recolectar información que permita determinar las responsabilidades locales en el caso de entrega de sobornos.
La orden de allanamiento fue autorizada por el juez coordinador de los Juzgados de Instrucción del Distrito Nacional, doctor José Alejandro Vargas. Se espera que en lo adelante se produzcan otras diligencias de este tipo.
Se supo, que las oficinas de Ángel Rondón, señalado como la persona que recibió los US$92 millones para los sobornos, están en el mismo edificio.
Previo al allanamiento, Rondón y otros tres investigados por el Ministerio Público acudieron ante el procurador general, Jean Rodríguez, a hacer algunas aclaraciones sobre la documentación que habían depositado; y otros, para ser interrogados por primera vez.
Los interrogados ayer fueron los exdirectores del Instituto Nacional de Aguas Potables y Alcantarillados (INAPA) Mariano Germán y Alberto Holguín.
Los llamados a hacer aclaraciones fueron Rondón y Marcelo Hofke, quien fue representado por su abogado Robert Valdez.
Rondón llegó a la Procuraduría a las 8:40 de la mañana acompañado de su abogado Tony Delgado. Salió a las 10:32. Reiteró que los recursos que recibió de parte de Odebrecht fueron en pago por servicios prestados, “no para comprar conciencia ni nada por el estilo”.
Restó importancia al acto de intentar dar una prebenda a un miembro de la seguridad de la Procuraduría, mientras lo escoltaba junto a otro a su llegada a la institución el pasado miércoles, y que fue captado por las cámaras de televisión.
El empresario dijo que corresponde al procurador general investigar si él pagó los impuestos correspondientes por los US$92 millones que, según dijo le pagó Odebrecht por servicios prestados y si patrocinó el Comando de Campaña del excandidato presidencial del partido Revolucionario Moderno (PRM), Luis Abinader.
Ignora presupuesto. Mariano Germán, exdirector del INAPA, dijo que acudió a una “entrevista” con el procurador general para explicar cómo invirtió el dinero de los acueductos construidos en las provincias Samaná y Hermanas Mirabal, pero cuyo presupuesto dijo desconocer.
Explicó que originalmente ese proyecto se contrató en una sola etapa y terminó en tres, porque la situación lo ameritaba; que pasó por cuatro manos, y que él solamente trabajó en una, cuando se inició en 2005.
Agregó que luego tocó a Frank Rodríguez, que había sustituido a Víctor Díaz Rúa como director del INAPA, y que finalmente, una etapa del acueducto Hermanas Mirabal la terminó el ingeniero Alberto Holguín.
“Hablamos claro sobre todo, de las etapas del acueducto múltiple de Samaná y el de la provincia Hermanas Mirabal, que yo manejé; ya lo de soborno tendrá que determinarlo el procurador: a quién se le dio el dinero, y si fue que hubo distribución de dinero, quién lo cogió”, dijo.
Aunque a su llegada a la Procuraduría, Holguín afirmó no haber firmado ningún contrato con Odebrecht, su interrogatorio se extendió por unas siete horas. Dijo que colaborará con las investigaciones.