La ausencia del sector empresarial en las reuniones del Comité Nacional de Salarios (CNS) para iniciar las discusiones sobre un posible aumento salarial es con la intención de hacer tiempo para que se prolonguen las discusiones, y así ellos obtienen un beneficio económico, ya que los acuerdos no tienen carácter retroactivo.
Así lo explicó ayer Rafael –Pepe- Abreu, presidente de la Confederación Nacional de la Unidad Sindical (CNUS), quien señaló que ya es una costumbre de los empresarios extender las discusiones, que pueden durar hasta seis meses, para que en todo ese tiempo que se tarde, no pagar el aumento que se fijaría al momento de que se llegue a un acuerdo en el CNS.
“Vemos que ellos tienen la intención de comenzar la discusión en julio. Si ellos logran que comencemos a discutir cuando la fecha de revisar la tarifa del salario está cercana a vencer o ya ha vencido, ese tiempo de discusión que libramos ellos se lo ganan a nivel de ahorro”, expresó.
Dijo que es un excusa de los patronos aún no haber designado a sus representantes para las discusiones del comité.
“Imagínese si nosotros dejamos la posibilidad de ese aumento en manos de ellos, nunca habría ocurrido”, dijo.
Pepe Abreu señaló que luego de que el expresidente del Consejo Nacional de la Empresa Privada (Conep), Pedro Brache, hiciera la propuesta de la necesidad de un aumento, pero voluntario, se hicieron varias consultas por separados, por lo que ha habido tiempo para designar su representación.
Dijo además que nunca los empresarios fueron a las reuniones del Consejo Consultivo de Trabajo.
El jueves las centrales sindicales asistieron a la segunda reunión del CNS, donde entregaron al director un propuesta de mejoras de los sueldos de los trabajadores.