El jefe de la Policía Nacional, mayor general Manuel de Jesús Pérez Sánchez, afirmó que los problemas de fondo de la delincuencia son el narcotráfico, la marginalidad y que en la actualidad el 75 por ciento de los deportados que vienen al país es por problemas ligados a las drogas.

El jefe policial entiende que no ofrece ningún resultado práctico la medida de que los deportados se presenten cada mes ante las autoridades.

Explicó que hasta que no se modifiquen las legislaciones no se puede obligar a nadie a presentarse ante la ley si no tiene ningún cargo pendiente con la justicia. «La idea es que debe venir a terminar de cumplir su pena si no lo ha hecho», apuntó.

Con relación a los deportados, reveló que se han iniciado las gestiones para construir la Casa del Deportado, en un «solar frente al Aeropuerto», con el fin de darle algunas orientaciones y tratamientos terapéuticos, así como identificar a esas personas y sus vínculos en el país para cuando haya que salir a buscarlos se puedan encontrar fácilmente, con la ubicación de su familia y del lugar de trabajo.

Pérez Sánchez habló en el lanzamiento de la primera Reunión de la Mesa sobre Seguridad Ciudadana, organizada por la Cámara de Comercio y Producción de Santo Domingo.

La reunión se efectuó en el Salón de Eventos de la entidad empresarial y participaron representantes de negocios y asociaciones de la Zona Colonial.

SEGURIDAD CIUDADANA

Pérez Sánchez dijo que  el momento actual amerita que las comunidades y la Policía sean socios para combatir la delincuencia.

«Para incrementar la seguridad ciudadana es necesario que se desarrolle en el país el concepto de una policía integrada con la comunidad y que ésta última elabore un plan de trabajo que le permita al cuerpo del orden ser más eficiente», afirmó Pérez Sánchez.

Explicó en su presentación que está de acuerdo en que el personal policial de las comunidades debe ser elegido de sus respectivos lugares para que los lugareños conozcan de la trayectoria personal y profesional de los agentes.

En tanto que el presidente y vicepresidente de la Cámara de Comercio de Santo Domingo, ingeniero José Manuel Armenteros y José Gabriel Roig, respectivamente, mostraron su preocupación por las necesidades de equipos y vehículos de la Policía.

Armenteros dijo que la Cámara está interesada en que la vida discurra lo más normal posible y que para ello se beneficie la vida productiva del país.

Informó que las Cámaras de Comercio localizadas en todas las provincias del país se han comprometido en realizar encuentros similares en sus respectivas comunidades, con el fin de contribuir a enfrentar el problema de la delincuencia.

Mientras que Miguel Sang Ben, del Instituto de Altos Estudios de la Paz y la Seguridad, dijo que el reto de las democracias es lograr unas cuotas de seguridad dentro de la permanencia de la democracia y se está discutiendo más abiertamente después del 11 de septiembre. «Es poder hacer controles  preventivos al terrorismo sin perder la esencia democrática y esta discusión está en todos lados».

Entre las instituciones y negocios articipantes figuran Cámara de Comercio y Producción de Santo Domingo, Patronato de la Ciudad Colonial, Instituto de Altos Estudios para la Defensa y la Seguridad Nacional, Asociación de Comerciantes de la Calle El Conde, Junta de Vecinos San Antón, Hotel de la cadena Accor, Cámara de Comercio Domínico Francesa, Librería La Trinitaria, El Molino Deportivo, Restaurant Petrus, Calzados Penny´s y Junta de Vecinos Juan Pablo Duarte.