El semanario haitiano Le Matin destaca en su editorial que el Presidente Leonel Fernández debe ser considerado como un amigo, por los esfuerzos que hace para ayudar a Haití a enfrentar la crisis social y económica acentuada por el terremoto del  12 de enero.

En la nota de esta semana,  cuyo autor se vuelca en elogios hacia el liderazgo internacional del mandatario y la estabilidad económica registrada en su Gobierno, se resalta también el amplio conocimiento de Fernández sobre la problemática social del Haití.

Sobre el particular se matiza que, en  la reunión sobre la reconstrucción, efectuada en el país la semana pasada, Fernández demostró que tiene más dominio de la situación haitiana que ciertos funcionarios de esa nación.

Al referir en ese contexto que  los haitianos le deben mucho al mandatario dominicano, el semanario resalta que en la  reunión Fernández prometió la construcción de una universidad con capacidad para diez mil estudiantes.

Aunque en términos de desarrollo no hay sincronía entre los dos países, después del sismo Fernández ha puesto en relieve los asuntos de Haití junto con los de República Dominicana de la forma más cordial e indulgente, se explica en la publicación.

El temblor de tierra del 12 de enero dejó un saldo de más de 200,000 muertos, miles de heridos y de mutilados, y más de 25,000 casas  destruidas.

Se estima que alrededor de 600,000 mil personas quedaron sin albergue, las que casi en su totalidad viven en casas de campaña improvisadas en las calles.

Para el día 31 de este mes está prevista la celebración de una cumbre en Nueva York, en la que  los líderes de los países donantes discutirán cuál será el modelo de reconstrucción que se implementará en la vecina nación, devastada por la fuerza del terremoto.

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El modelo RD

Para ponderar las cualidades de Fernández, Le Matin cita logros de su administración en materia macroeconómica, en el control de la inflación y en el crecimiento del turismo pese a la crisis económica de 2008. Al reconocer que ha insertado al país en un proceso de modernización tecnológica, expresa que a pesar de sus escasos recursos  ha estabilizado su país mejor que  Hugo Chávez, quien no ha hecho lo mismo con una Venezuela rica en petróleo.