Periodistas dominicanos en la ciudad de NY condenaron la agresión contra varios colegas suyos y el Defensor del Pueblo, Pablo Ulloa, por parte de miembros de la Dirección General de Seguridad de Tránsito y Transporte Terrestre (Digesett) cuando cumplían con su deber en la República Dominicana.

Entre quienes condenan la agresión están Ramón Mercedes, autor de esta crónica, William Jiménez y Román Polanco.

Precisan que el doctor Ulloa también es el presidente de la Federación Iberoamericana de Ombudsman (FIO), que agrupa a más de 75 integrantes, entre Defensores del Pueblo, Procuradores, Proveedores, Razonadores, Comisionados y Presidentes de Comisiones Públicas de Derechos Humanos de los países iberoamericanos.

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A principio de esta semana, Ulloa, junto a varios comunicadores, se presentó a las instalaciones del Centro de Retención Vehicular El Coco (Canódromo), a realizar una inspección por la excesiva cantidad de vehículos “chatarras” que existen y denuncias de corrupción, pero fueron recibidos con violencia por la coronel comandante y otros oficiales asignados al lugar.

Asimismo, aparte de agredir físicamente a los periodistas, los agentes de Digesett incautaron cámaras y celulares, borrándole las imágenes y grabaciones recogidas para luego devolver los equipos.

Los periodistas en NY recordaron la proclama de George Washington: “Si nos quitan la libertad de expresión nos quedamos mudos y silenciosos y nos pueden guiar como ovejas al matadero”

Además, “una amenaza o agresión dirigida contra uno, es una amenaza y agresión dirigida contra todos”, precisan Mercedes, Jiménez y Polanco.

Sostienen que el accionar violento contra los periodistas y el alto funcionario gubernamental tira por el suelo lo planteado recientemente por el presidente Luis Abinader.

El pasado “Día del Periodista” el mandatario proclamó: “A los funcionarios, que no existe ninguna democracia sin libre información”. “La democracia es un sistema de toma de decisiones colectivas basado en el acceso libre a la información, y los periodistas son los profesionales responsables de la obtención, interpretación, tratamiento, análisis y difusión de la información”.

Además, la Constitución dominicana que en su Artículo 190 sostiene que el Defensor del Pueblo es una autoridad independiente en sus funciones, con autonomía administrativa y presupuestaria. Se debe de manera exclusiva al mandato de esta Constitución y las leyes.

Los comunicadores sostienen que una reacción tajantemente violenta de recibir al funcionario y los miembros de la prensa por parte de los agentes en el Canódromo es la respuesta para que no se viera el desorden administrativo que impera allí.

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El mismo Defensor del Pueblo ha denunciado que existe una mafia, una estructura enorme de corrupción millonaria, convirtiendo el lugar en un “antro de corrupción”.

Los periodistas en NY que condenan la agresión esperan que la directora general de Ética e Integridad Gubernamental (DIGEIG), Milagros Ortiz Bosch, tome carta en el asunto, ya que estamos frente a un caso muy grave para la democracia e institucionalidad del país.