Hoy 
POR RADHAMES GONZALEZ
La mayoría de los síndicos de los ayuntamientos bajo control del Partido Revolucionario Dominicano (PRD), así como los presidentes de las cámaras legislativas que también controlan los perredeístas, están enfrentando presiones de militantes de esa organización cancelados por la nueva gestión del Partido de la Liberación Dominicana (PLD).
«La avalancha de compañeros que comenzaron a ser cancelados al día siguiente del PLD haber asumido el gobierno, desborda nuestra capacidad», dijo uno de los síndicos consultados telefónicamente que rehusó ser identificado.
La situación se presenta mayormente en la sede del Congreso Nacional y en los ayuntamientos de la provincia de Santo Domingo, donde el PRD controla 4 de los 5 cabildos que componen dicha demarcación.
El síndico de Santo Domingo Este, Domingo Batista, dijo que en el cabildo no tiene una agencia de empleos y que el compañero que quiera trabajo, tendrá que buscarlo en las obras que se construyen en esa demarcación.
Batista dijo que ha sido claro y preciso con los militantes perredeístas que por diferentes vías, buscan un empleo en el Ayuntamiento del Municipio de Santo Domingo Este.
Se trató también de obtener reacciones ante esa situación de los síndicos de los municipios de Santo Domingo Norte, Daniel Carvajal Louis y de Francisco Peña, síndico de Santo Domingo Oeste.
En ninguno de los casos fue posible obtener la reacción de ambos ejecutivos municipales, porque no tuvieron disponibles para responder las llamadas telefónicas que se les hicieron.
Del cabildo de Santo Domingo Oeste, se supo que fue el que más empleados y trabajadores perredeístas asimiló cuando fueron cancelados a partir del 16 de agosto del año 2002, fecha en que el PLD a través del síndico Roberto Salcedo, asumió la dirección del Ayuntamiento del Distrito Nacional.
De los busca-empleos perredeístas, no han escapado los incumbentes de las cámaras legislativas, Andrés Bautista García, presidente del Senado y representante de la provincia Espaillat, y Alfredo Pacheco, presidente de la Cámara de Diputados, del Distrito Nacional.
El presidente del Senado al igual que el síndico de Santo Domingo Este, hicieron planteamientos en ese sentido. Pacheco ha sido más reservado, pero no ha escapado a las presiones de sus compañeros de partido.
«Nosotros, al igual que los peledeístas, también tenemos nuestros problemas», declaró uno de los incumbentes de las instituciones sometidas a presión.
