POR LLENNIS JIMÉNEZ
El control de la criminalidad organizada fracasa en los países de América Latina por los insuficientes sistemas de investigaciones para casos complejos, así como el uso de procesos inquisitivos caducos e inoperantes, advirtió el ex fiscal de Argentina, Maximiliano Rusconi.

El abogado experto en temas de la criminalidad dijo que la persecución contra el crimen organizado fracasa en la región como consecuencia de los deficientes modelos de organización de las instituciones vinculadas en el sistema e justicia, la incapacidad procesal y por el hecho de sólo desarrollar embriones de modelos de cooperación internacional.

Manifestó que en estas naciones no se ha desarrollado la figura central del fiscal para los modelos de investigación y dijo que ahora es cuando en República Dominicana y otros países con modelos acusatorios, de comprender el rol trascendente que tiene el fiscal en la conducción de la investigación de los casos.

Rusconi fue uno de los dos expertos argentinos invitados al país para exponer sobre la «criminalidad organizada: narcotráfico, lavado de activos, terrorismo y corrupción». El un seminario realizado en un hotel de esta capital fue organizado por el Comisionado de Apoyo a la Reforma y Modernización de la Justicia, para los funcionarios judiciales, de las instituciones que luchan contra las drogas y personal de la banca estatal.

El consultor internacional consideró que hay una cifra negra de delitos cometidos enormes. Dijo que en una visita por las cárceles de América Latina y el Caribe se podrá comprobar que al sistema entran ciudadanos de con niveles de pobreza alarmantes, muchas veces por un color de piel similar, con historia de vida muy dramática, con destino social destruidos, niveles de vida clandestinos, y que han cometido delitos contra la propiedad.

«Es decir, que del universo de delitos cometidos en un determinado momento, en una determinada sociedad, ingresan al sistema penal, solo un porcentaje», dijo.

A su entender, de esto podría creer que hay dos diagnósticos posibles: «que las clases pobres son las únicas que delinquen o el sistema persigue solo a las clases pobres».

Expresó que parece raro que delincan solo los pobres, por lo que se entendería que el sistema solo persigue el tipo de delito que implica la selección de ciertas fianzas sociales.

Rusconi, quien expuso un conjunto de recetas para hacer más eficiente el control penal en lo que se llama la delincuencia organizada, afirmó que socialmente se necesita el derecho penal, aunque sea de modo simbólico.

Planteó, sin embargo, que no hay forma de que el sistema no sea selecto y que investigue todos los delitos cometidos. «Ya hoy la Fiscalía, los juzgados de nuestro país están abarrotados de asuntos. Ya hoy los sistemas burocráticos están colapsados».

El ex ministro de Justicia argentino es partidario de que la justicia empiece a ocuparse de los casos de mayor trascendencia, de los que generan más pobreza.

DAÑÓ ECONOMÍA

El ex fiscal argentino sostuvo que quizás la totalidad de los casos investigados por hurtos simples de República Dominicana no llega al 50% del daño que le ha hecho el caso BANINTER a su situación socioeconómica y a la pobreza futura de ciertas clases sociales de este país».

«El caso BANINTER (Banco Intercontinental) es equivalente en cuanto a su perjuicio económico ¿a cuántos casos de hurtos simples?», dijo.

Se preguntó por qué no concentrar todos los esfuerzos en el caso BANINTER, el que dijo que citó por recordarlo desde el año pasado.

Indicó que se le saca más provecho al sistema de justicia si las autoridades se ocupan de aquellos casos que afectan más directamente la situación socioeconómica, a la vez que se gana más credibilidad frente a la comunidad, porque advierte que se investiga con criterios objetivos los casos de mayor impacto.

«Entonces, no es contradictorio ideológicamente pensar que el sistema penal no es un buen modelo de control social y al mismo tiempo sostener que es preciso ser eficiente justamente en los casos de delincuencia organizada», señaló.

Para Rusconi se fracasa en el control de la delincuencia organizada por razones internas y externas, lo que definió como el fenómeno que se regula o por razones de la propia organización.

No descarta que se a nivel interno se fracase en la persecución de la delincuencia organizada, porque los modelos de investigación y de tratamiento de delincuencia organizada lleva sistemáticamente al fracaso, que entre otras causas, cuenta con un sistema de investigación inquisitivos, lo que es igual a no tener sistema de investigación.

Afirmó que República Dominicana ha dado un paso fundamental en el cambio de su modelo procesal, con la aplicación del Código Procesal Penal, hace algunos meses.

Criticó que al autor del delito se le torture para que para que declare. «En toda América Latina y el Caribe hemos sido influidos por la inquisición, con lo cual, no hemos sabido desarrollar sistemas de investigación criminal».