Personal del sector salud demanda ante Congreso alza 100% en salarios

Personal del sector salud demanda ante Congreso alza 100% en salarios

Representantes del Colegio Médico Dominicano (CMD) y de los demás gremios del sector salud montaron un piquete ayer la sede del Congreso Nacional en demanda de que el hemiciclo conozca el proyecto de ley que busca crear nuevos impuestos para un aumento salarial de un 100 por ciento.

Al llegar a la sede del Congreso, los médicos pidieron entrevistarse con el presidente del Senado, Jesús Vásquez Martínez, pero el legislador dijo a los periodistas que no tenían cita y que ya se había reunido con ellos en dos oportunidades.

Los doctores Waldo Ariel Suero, presidente del CMD, José Gabriel Fernández, presidente de la Agrupación Médica del Instituto de Seguros Sociales (IDSS), así como Wilson Ramírez y Adolfo Rodríguez, presidente de la Asociación Odontológica y representante de las enfermeras.

A su llegada al Congreso, el senador peledeísta José Tomás Pérez prometió mediar con la presidencia del Senado para que lo recibieran, pero no fue posible, en tanto que los médicos no volvieron a ver al legislador peledeísta.

Médicos, enfermeras, bioanalistas, odontólogos y farmacéuticos reclamaban ante el Congreso Nacional que se conozca el proyecto que busca crear nuevos impuestos a las bebidas y cigarrillos considerados costosos y de gusto refinados.

En principio se había anunciado que los médicos habían organizado una velada, la cual estaba programada para las 10:00 de la mañana, pero una vez allí se intentó que la actividad se convirtiera en visita.

Al llegar a la parte frontal del Congreso, los guardias y policías que custodian el edificio, impidieron que los representantes de ese gremio penetraran a la sede.

En cuestión de minutos fue reforzada la seguridad del edificio, pero los trabajadores de la salud explicaban que habían ido al lugar para hablar con los senadores, con el presidente del Senado y específicamente con el senador Rafael Díaz Filpo, designado por ellos para presentar el proyecto de ley.

El personal de salud de varios hospitales estuvo en la entrada del Congreso vociferando consignas en favor de que se conozca su situación económica.

RECIBEN APOYO

Al no ser recibido en la oficina del presidente del Senado, los médicos decidieron tomar las calles de la zona, tras considerar que se trató de una descortesía por parte de los congresistas.

A las 11:00 de la mañana, los trabajadores de la salud tomaron la avenida Winston Churchill y luego la Independencia. A su paso por la sede de la Lotería, del edificio de Antena Latina y del hospital Robert Reid Cabral, decenas de personas se unían a sus consignas, pero algunos les reclamaban que muchos de ellos, los médicos, votaron por el presidente Hipólito Mejía.

En las calles, la gente vociferaba consignas en favor del aumento salarial, contra el gobierno y en favor de que se produzca una mejoría en los hospitales del Estado.

«Situación insoportable, cien por ciento innegociable», «ni un chele más, ni un chele menos, un 100 por ciento es lo que queremos», fueron algunas de las consignas.

Empleados públicos que estaban en los alrededores de La Feria, la Lotería y otros edificios públicos. se solidarizaban con los reclamos médicos y en ocasiones se unían a sus consignas.

TODO CARO

Tanto en la marcha de médicos por las calles del Centro de los Héroes como en las inmediaciones del Congreso, los médicos residentes comentaban las penurias que pasan para poder comprar un libro.

«A mí lo que gano, no me alcanza para nada. Un libro de técnica quirúrgica cuesta hasta RD$18,000.00, cómo se puede aprender si los libros tienen precios inalcanzables», sostenía un médico residente de la especialidad de cirugía del hospital Francisco Moscoso Puello.

Otros médicos conversaban de que tienen que ir en carros públicos y hasta en taxis a sus trabajos y que son tan bajos los salarios, que ya no tienen esperanza de poder comprarse un carro.

En medio de la protesta los profesionales, médicos, enfermeras, bioanalistas y farmacéuticos comentaban las condiciones económicas que les han llevado a bajar su calidad de vida.

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