La estabilidad macroeconómica para el próximo año se vislumbra que continuará con el mismo vigor que finalizó el 2016, y con perspectivas de que los diferentes sectores productivos, comercial y servicios se mantendrán en expansión, mientras las diversas variables registrarían un crecimiento sostenido.
Se pronostica que el (PIB) crecerá en 2017 por encima del 5.5 por ciento mientras que la inflación continuará por debajo del 5.0%. En tanto seguirán con gran dinamismo la construcción, comercio, turismo, intermediación financiera, agropecuaria, minería, telecomunicaciones, salud, enseñanza, transporte y manufactura. La economía reflejó en el período enero-septiembre un crecimiento de 6.9%, de acuerdo con cifras del Banco Central, que destaca que se mantendrá su expansión por encima de su potencial, lo que indica que el país seguirá como líder del desempeño económico de Latinoamérica. Se proyectaba que finalizaría el 2016 con un crecimiento de 7.0%. Se pronostica que en 2017 las exportaciones de bienes, la inversión extranjera directa y las reservas internacionales seguirán en expansión. Un manejo correcto de la política fiscal, como ha sido hasta el momento, refleja una vigorosa estabilidad macroeconómica. El crecimiento de los diferentes sectores de la economía trae consigo un aumento del nivel de empleo.
En 2016 se logró reducir el déficit de la cuenta corriente de la balanza de pagos, pasando de US$4,359.0 millones en el 2011, equivalente a 7.5% del PIB, cerrando en el 2016 en US$1,100.0 millones, equivalente a 1.6%. En tanto, la tasa de inflación acumulada de enero a noviembre fue de 0.79%, mientras el Banco Central mantiene la tasa de política monetaria en 5.50% anual, lo que contribuirá al dinamismo de los diferentes sectores de la economía.
Además, en este año llegaron nuevas inversiones como empresas de zonas francas y en el área de la hotelería.