LIMA— El expresidente peruano Alberto Fujimori, quien cumple una condena a 25 años de prisión por violaciones a los derechos humanos y corrupción, ingresó en una clínica aquejado por una dolencia cardíaca.
Alejandro Aguinaga, exministro de Salud del gobierno de Fujimori y su médico de cabecera, informó el lunes en su cuenta en Twitter que Fujimori fue internado la noche del domingo en la clínica privada Centenario Peruana Japonesa por “presentar cuadro de fibrilación descompasada”, una dolencia que le había sido detectada años atrás.
El expresidente (1990-2000) estuvo internado en el mismo centro sanitario por más de 100 días hasta que en enero retornó a la cárcel luego de que la justicia anuló un indulto que le había dado una breve libertad a fines de 2017.
Antes de su retorno a prisión un juez determinó en una resolución que, de acuerdo con médicos que revisaron a Fujimori, el expresidente tiene dolencias cardíacas e hipertensión desde hace varios años que lo han llevado con frecuencia a ser internado.
En 2009 Fujimori fue sentenciado por la autoría intelectual del asesinato de 25 peruanos a manos de un escuadrón militar que combatía al grupo terrorista Sendero Luminoso con métodos de guerra sucia y, según los jueces, con conocimiento del exmandatario entre 1991 y 1992.
En los últimos días de su gobierno en el año 2000 Fujimori escapó de Perú acosado por los escándalos de corrupción de su gestión y desde Japón renunció a la presidencia. El Parlamento entonces lo destituyó por “incapacidad moral”. Luego el exmandatario se postuló sin éxito al Parlamento japonés y en 2007 retornó a Chile, donde fue detenido y extraditado a Perú.
Fujimori culminará su condena en 2033, a los 95 años. El exmandatario tiene otras tres condenas por corrupción y deberá seguir asistiendo a los tribunales porque está en juicio por el crimen de seis campes