La muerte de la diseñadora Jenny Polanco a causa del coronavirus, anunciada ayer por el ministro Rafael Sánchez Cárdenas, llena de luto a diferentes sectores de la vida nacional y en especial al mundo de la moda dominicana, al que estuvo ligada por más de 40 años y del que se convirtió en un referente de vanguardia, calidad y exquisitez por el uso de sus cortes depurados y femeninos, del lino, el color blanco y los detalles en piedras semipreciosas de origen dominicano, tales como el ámbar y el larimar.
Jenny nació en Santo Domingo un 18 de enero de 1958. Estudió Diseño de Interiores en la Universidad Nacional Pedro Henríquez Ureña (UNPHU) y fue en la prestigiosa Escuela de Diseño Parsons, en Nueva York, donde hizo estudios de patronaje, técnicas de sastrería y drapeado artístico. A su regreso y con estos conocimientos, allá por 1978, comenzó una carrera ascendente en el mundo de la moda local, empezando por montar su atelier. Tiempo más tarde, a inicios de los ‘80, abrió su boutique en el antiguo hotel Sheraton, donde, de manera meteórica, sus diseños calaron en el gusto de las extranjeras que visitaban ese hotel.
A mediados de la década de los ‘80, Polanco abrió una boutique en Puerto Rico y expandió su marca a otras plataformas internacionales, como Nueva York y París, y a nivel local se convirtió en la diseñadora que más presencia tuvo con boutiques exclusivas en los hoteles más prestigiosos de los polos turísticos del país.
Sus diseños “prêt-à-porter” se destacan por ser sofisticados, sencillos, clásicos y fáciles de usar, con toques distintivos dominicanos, como botones de ámbar, larimar, perlas y corales.
Durante la última década se dedicó al diseño y creación de joyas y complementos, como carteras “inspirados en los tonos y transparencia del ámbar combinado con perlas, piel y piedras semipreciosas realizados a mano haciendo énfasis en la feminidad y la elegancia del Caribe.
En la actualidad tenía abiertos seis establecimientos, dos en La Romana y cuatro en Santo Domingo: Jenny Polanco Project, en Altos de Chavón, Jenny- Polanco- Bibi León, en la Marina Casa de Campo y en los centros comerciales Blue Mall, Bella Vista, Casa Virginia y Ágora Mall.
Diferentes personalidades han manifestado su pesar en las redes sociales por la muerte de la diseñadora, quien fue una de las primeras en dar positivo al coronavirus en el país, tras regresar de una estadía en España. Le sobreviven sus hijos Carla y Luis Carlos Quiñones Polanco.
Opiniones:
Robin S. Bernstein, embajadora de los EE. UU. “La embajada de los Estados Unidos está profundamente apenada por la noticia del fallecimiento del ícono de la moda dominicana Jenny Polanco. Lamentamos su fallecimiento y las demás pérdidas en la República Dominicana como resultado de la pandemia que azota al mundo.”
Margarita Cedeño, vicepresidenta. “Me llena de tristeza el fallecimiento de la querida y admirada Jenny Polanco, quien llevó en alto nuestra bandera por las pasarelas con excepcionales diseños. Mis oraciones están con sus familiares y con los demás fallecidos. Que Dios los tenga en su gloria”.
Leonel Fernández, expresidente. “Aprovecho para extender mis condolencias y solidaridad con la familia de la destacada diseñadora Jenny Polanco, a quien hemos perdido a causa de esta lamentable pandemia. El momento requiere que acatemos las medidas de las autoridades y que persistamos en la unidad”.
Miguel Genao, diseñador.“Te agradeceré todos los consejos y todo lo que hiciste por la moda dominicana. Estoy destrozado y aun me cuesta creerlo. Siempre fuiste la favorita de mi madre y de muchas mujeres en el mundo”
Helen Blandino, influencer. “Tuve el honor de trabajar junto a doña Jenny desde mis inicios y muy cerca en su última colección, qué alma tan sensible al arte, ¡cuánto amor, cuanto talento y derroche de buen gusto! La moda dominicana está de luto, su legado permanecerá por siempre, al igual que la elegancia de sus diseños. ¡El cielo recibe a una gran artista hoy! Paz a sus familiares y que Papa Dios la tenga en su gloria”.

Sandro Guzmán, Ossygeno Models. “Las palabras nos faltan para describir tu legado, cuatro décadas de dedicación y entrega a la moda dominicana. Mujer fuerte, segura, visionaria, soñadora. Fuiste referente de moda con efectividad para una generación completa”.