El presidente de la Asamblea Nacional Ambiental (ANA), Domingo Abreu Collado, precisó hoy que a pesar de la firma de un nuevo contrato entre el Estado dominicano y la empresa minera Barrick Gold, un sector del movimiento ambiental se opone a la presencia de la minera canadiense en el país.

“Creemos que ningún contrato con esas empresas es saludable para la República Dominicana y su población”, insistió Abreu Collado, al referirse a la Barrick Gold y Goldcorp.

Agregó que un grupo de los ambientalistas no están de acuerdo con que exista un convenio entre el Gobierno dominicano y Barrick.

Reconoció que con relación a la presencia de la minera canadiense en suelo dominicano, la población no tiene un “reclamo” único, sino que tiene posiciones divididas.

“Los ambientalistas y numerosas organizaciones sociales, profesionales y campesinas estamos totalmente opuestos a la presencia de las empresas megamineras, incluidas Barrick Gold y Goldcorp, en la isla de Santo Domingo”, expresó.

Puntualizó que una parte de la población cree que se va a beneficiar de alguna manera con el nuevo contrato con Barrick porque se trata de oro y lo vende la República Dominicana.

“Esta parte de la población, bastante confundida por los medios de comunicación, porque no informan, no tiene idea de qué es lo que está pasando. Solo oyen hablar de miles de millones de dólares y piensan que esos dólares van a lloverles en cualquier momento”, manifestó.

Otros sufren daños ambientales. Con respecto a los daños ambientales, dijo que  muchas personas ya están sufriendo en carne viva los efectos de la explotación de oro por parte de Barrick y Goldcorp.

En ese sentido, mencionó parajes como Las Lagunas, La Cerca, La Piñita y El Naranjo, donde los residentes están pidiendo al Estado que les saque de esa parte de Cotuí y les reubique en una zona sana, debido a que los arroyos Mejiíta y Margajita, el río Maguaca y otros menores, están totalmente contaminados.

“Igualmente contaminado está el aire, que a veces se les hace irrespirable”, lamentó.

Explicó que estas personas están padeciendo no solamente de problemas cutáneos, sino también visuales, abdominales, vaginales, anales y respiratorios.

Estimó que hay cerca de tres mil 600 personas bajo esas condiciones ambientales, por las cuales han muerto algunas, según dijo.

“Sin mencionar la pérdida de cientos de cabezas de ganado vacuno, aviar, caprino, porcino y equino, además de las lluvias ácidas que están mermando la producción de café, cacao y frutales”, sostuvo.

Muchos no piensan en el país. El ambientalista también declaró que existe un pequeño grupo de personas a quienes no les importa lo que puede perder el país, porque aguardan beneficios ligados a su participación en la entrega del oro.

Reveló que en este grupo hay funcionarios, diputados, senadores, gobernadores, síndicos, jefes políticos y algunos comerciantes.

“Incluso hay comerciantes del arroz en el Cibao que están apostando a su éxito si ocurre una desgracia ambiental, contaminante, un derrame de cianuro, por ejemplo, que dañe las plantaciones de arroz del Bajo Yuna”, indicó.

Abreu Collado dijo que además de ANA, se unen a su parecer, el Comité Nacional Contra la Megaminería y el Cianuro, el Colegio Médico Dominicano (CMD) y la Articulación Nacional Campesina (ANC).