El precio del dinero sigue en ascenso a nivel global, mala noticia para consumidores, pagaran un mayor costo por endeudamiento, e inversores, se les encarece el capital de los nuevos proyectos.
La historia monetaria mundial no registra otra escalada abrupta igual y en tan poco tiempo, sin importar el costo económico y social los principales bancos centrales procuran enfriar la demanda y la economía para reducir la inflación a 2% en el mediano plazo, lo que parece están logrando, el barril de petróleo West Texas Intermediate se redujo de 105.76 dólares el 1ro. junio 2022 a 75.97 dólares el pasado viernes.
La Reserva Federal de Estados Unidos ejecuta el mayor endurecimiento de su política desde que Paul Volcker pulverizó la hiperinflación a principios de los ochenta, aumentó en un cuarto de puntos los tipos de interés para situarlos entre 4.50% y 4.75%, la octava seguida, no obstante, en Estados Unidos la inflación interanual desacelera desde 9.1% en junio a 6.5% en diciembre 2022, y desde 6.0% a 5.7% la subyacente que excluye energía y alimentos.
El Banco Central Europeo aumentó 50 puntos básicos hasta 3%, el precio más alto desde 2008, a pesar de que la inflación se redujo desde 9.2% en enero 2022 a 8.5% a final de año, y el Banco de Inglaterra también 50 puntos básicos, hasta 4.00%, su nivel más alto desde 2008.
El pronóstico de nuestro Banco Central para la economía dominicana, que creció 4.9%, el PIB nominal en US$114,000 millones, el per cápita US$9,975 y creó 92,642 nuevos empleos netos en 2022, que la inflación estará en torno a 4% anual antes de finalizar este año. Aunque no lo dice de esta manera, se apoya en que productor y consumidor han asumido sin traumas los aumentos de precio del dinero, lo que junto a otras políticas monetarias restrictivas, explican la continua desaceleración de la inflación interanual, acumulado 181 puntos básicos, de un máximo de 9.64 % en abril a 7.83 % al cierre de 2022, y la inflación subyacente en 73 puntos básicos, de 7.29 % en mayo a 6.56 % en diciembre de 2022.
El comportamiento ascendente del PIB real y descendente de la inflación, explican porque el Banco Central ha mantenido sin cambio su tasa de interés desde que la aumentó a 8.50% en octubre de 2022, y lo mismo las que aplica a bancos comerciales en sus operaciones regulares, en 9.00% la de “facilidad permanente de expansión de liquidez (Repos a 1 día)”, que traduzco “para que los bancos comerciales no tomen mayores cantidades de dinero prestados al Banco Central y presten menos”, y en 8.00% la tasa “depósitos remunerados (Overnight”), mi traducción “para que los bancos comerciales guarden en el Banco Central mayor cantidad de liquidez y presten menos”.
El riesgo es que a la guerra en Ucrania y a la incertidumbre que genera la continua desglobalización del comercio mundial, se sume que las subidas de los tipos de interés hasta niveles restrictivos de los principales bancos centrales ocasionen, como dicen los economistas teóricos, desconexión de la economía mundial de la curva de Phillips (William Phillis, 1958), sucedió a principios de los años setenta del siglo pasado, cuando al mismo tiempo hubo alta inflación y alto desempleo por la fuerte subida de precio del petróleo.