El precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) cerró este lunes con una bajada del 1,6 %, hasta 91,13 dólares el barril, con los inversores preocupados por la posibilidad de que la actual coyuntura económica desemboque en una recesión global que afectaría a la demanda de crudo.

Al finalizar las operaciones en la Bolsa Mercantil de Nueva York (Nymex), los contratos de futuros del WTI para entrega en noviembre perdieron 1,51 dólares con respecto al cierre anterior.

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Tras las fuertes subidas de la semana pasada, el petróleo de referencia en EE.UU. se inclinó hoy hacia el rojo por los miedos a una recesión, alimentados por las palabras de varias figuras influyentes en los mercados.

Por ejemplo, el principal ejecutivo del banco JPMorgan Chase, Jamie Dimon, consideró hoy probable que Estados Unidos caiga en recesión hacia mediados del próximo año, en un plazo de 6 a 9 meses, aunque dijo que es difícil predecir lo profunda que esa ralentización económica será.

El temor generalizado es que la agresiva subida de los tipos de interés que la Reserva Federal (Fed) está llevando a cabo para contener la inflación termine por causar esa recesión.

El presidente de la Fed de Chicago, Charles Evans, confirmó hoy que el banco central estadounidense va a seguir por esa senda, pues tiene como gran prioridad estabilizar los precios, incluso si ello deriva en daños en el mercado laboral.

También contribuyó a la bajada del precio del petróleo la fortaleza del dólar, que hoy siguió subiendo con respecto a otras divisas, lo que encarece el producto para compradores extranjeros.

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Los contratos de futuros de gas natural para noviembre bajaron 31 centavos de dólar, hasta 6,43 dólares, y los de gasolina con vencimiento el mismo mes perdieron 11 centavos, hasta los 2,62 dólares el galón.