El ex vicepresidente Jacinto Peynado planteó ayer que por la situación delicada que vive la República Dominicana, los líderes políticos y sociales de la nación deben elaborar un proyecto de país que plantee solución a los diversos problemas nacionales para que se restablezca la confianza de los dominicanos.

En un encuentro con la prensa en su oficina privada, Peynado precisó que su planteamiento no se trata de demagogia política.

Dijo que no cree en la creación de un gobierno de unidad nacional para nombrar a dos o tres en secretarías de Estado y repartirse los puestos como si el Estado fuera un pastel, porque eso no resulte nada, sino que los líderes políticos participen en la deliberaciones y el Presidente de la República que resulte ganador analice, pondere y debata las ideas expuestas por los partidos políticos.

Subrayó que ante las desapariciones físicas de los líderes políticos Joaquín Balaguer, José Francisco Peña Gómez y Juan Bosch, los líderes emergentes tendrán que jugar su papel.

El dirigente político entiende que por medio al diálogo los diversos sectores de la nación deben abocarse a buscar respuestas a las dificultades que padecen los dominicanos.

Dijo que no ha visto en los últimos tiempos a un presidente de la República sentarse con los congresistas y la oposición para dialogar sobre lo que se debe hacer por el bien del país.

«Aquí tenemos todos que reflexionar y entender que este país está en una situación difícil, debe unir a todos sus líderes políticos, económicos y sociales, gremiales para ver si se hace un proyecto de país», subrayó.

Manifestó que hay quienes observan que la campaña será bastante violenta por los intereses que hay entre el Presidente Mejía, el que dijo se quiere quedar, y Leonel Fernández que lo quiere sacar del poder.

Peynado dijo que lamenta mucho lo que pasa en el país y que se haya llegado a estos extremos de crisis.

Manifestó que el problema no es averiguar de quién es la culpa de los problemas nacionales sino resolver para enderezar los entuertos.

Consideró que el presidente que sea electo lo que tiene que hacer es mirar hacia adelante y no comenzar a buscar chivos expiatorios y a hacer circos sino tratar de que el país se unifique para trabajar por una mejor nación.

El ex vicepresidente de la República calificó la situación económica del país de delicada.

Subrayó que la queja de la población se escucha a diario por el alto costo de la vida.

«Los médicos, los choferes, los controladores de los aeropuertos, los empresarios, todo el mundo está protestando porque estamos viviendo una situación difícil y la culpa es de muchos es de todos. Y el problema no es lamentar sino resolverla», manifestó.

Asimismo, consideró lamentable el tema de las alzas del dólar, de la medicina, los supermercados, la comida y la situación de los hospitales.

«Debe de mejorarse esa situación, que haya una presidencia de la República que enfrente los problemas, no por un día sino que cree una estructura que se mantenga para siempre», subrayó.