A primera vista parecería que Pfizer, Monderna, Astra Zenecca y Sputnjik 6 son los nombres de las vacunas anticovid escritos de forma errónea. Pero no es así. Se trata de cuatro nuevos cócteles que ofrece un bar de Zagreb inspirado en las inyecciones contra el coronavirus.
“La idea surgió mientras varios compañeros tomábamos copas”, cuenta a Efe Tomislav Perko, propietario del “Roots juice&cocktail bar”, situado en el centro de la capital croata. “Estábamos tomando ‘Penicilline’ (un conocido cóctel que se ofrece en numerosos bares de todo el mundo) y alguien dijo-‘¿Porqué no tomamos Pfizer o algo similar?’”, prosiguió Perko.
De allí surgió la idea de crear cuatro cócteles según las cuatro vacunas más conocidas, combinando en cada uno ingredientes relacionados al origen de los fármacos que han dado lugar a los nombres. Y, por supuesto, el cóctel llega acompañado de un jeringuilla.
“El alcohol base en cada cóctel es del país en que la vacuna se produce”, de modo que, por ejemplo, Pfizer, inspirado en la vacuna de la farmacéutica estadounidense-germana Pfizer/Biontech, mezcla whisky estadounidense y el Jägermeister alemán, precisó. Claro está que el vodka es la base de Sputnjik 6 (inspirado en el fármaco ruso Sputnik V), mientras que para Astra Zenecca, según la vacuna exclusivamente europea más usada hasta ahora, creada por el consorcio sueco-británico AstraZeneca, se optó por la ginebra.
Otros ingredientes tienen connotaciones medicinales, como licores de hierbas amaro o Chartreus, Aperol y Firewater bitter, además de zumos y extractos de frutas de las que se asegura que ayudan a mejorar la inmunidad general de las personas.
“Se trata de una oferta deliciosa en torno a la que la gente fácilmente entra en cachondeo relajado con un tema que nos ha abrumado durante meses”, consideró un visitante. El cliente mismo tiene que inyectar el último ingrediente, que está en la jeringa con la que se sirve el cóctel, y al final también recibe un sello en un pequeño certificado, sobre las dosis de Astra Zenecca, Sputnjik 6 o lo que haya recibido.
A la hora de bautizar los cócteles se optó por modificar levemente el nombre original de la vacuna, para evitar cualquier eventual malentendido, explicó el dueño del conocido bar de la diminuta calle de Tomiceva, cerca del funicular del casco antiguo de Zagreb. El número de dosis no es tan limitado como en el caso de las verdaderas vacunas y ha habido clientes que se han tomado las cuatro diferentes en una misma tarde, mientras se recomienda beber al menos una segunda dosis como mínimo en el plazo de dos semanas.