La Procuraduría General de la República incineró más 54 kilos de distintas sustancias narcóticas ocupadas por las autoridades en variadas circunstancias y que ya habían sido analizadas en los laboratorios del Instituto Nacional de Ciencias Forenses (Inacif).

Detalles del último informe del Inacif indica que incineró las drogas correspondientes a 826 casos que recibió en la semana del 11 al 17 del mes en curso.

El peso de las sustancias destruidas sumó 54 kilogramos, 700 gramos y 738 miligramos.

La mayoría corresponde a marihuana, con 40 kilos, 67 gramos y 862 miligramos. El informe de los narcóticos destruidos en esta incineración detalla también 12 kilos, 473 gramos y 491 miligramos de cocaína; un kilo, 841 gramos y 223 miligramos de crack; 317 gramos, 740 miligramos de éxtasis y 422 miligramos de tramadol.

En adición, destaca la quema de 4 kilos, 367 gramos y 770 miligramos de sustancias que resultaron negativas luego de ser analizadas en los laboratorios del Inacif.

El documento de 56 páginas explica que del 7 de enero al 18 de marzo del año en curso se han incinerado 4,905.797 kilos de drogas, aclarando que el 98% fue de sustancias controladas y el resto negativas.

De ese total, el 60.13% corresponde a cocaína, 30.60% a marihuana y el resto de crack, heroína y éxtasis. En menor proporción se incluyen zoldipina, tramadol y oxicode.

Dentro de las provincias con mayor incautación de droga se cuentan Santo Domingo, Barahona, San Pedro de Macorís, Distrito Nacional, La Altagracia, Peravia, San Juan, Pedernales, Santiago, Independencia, La Romana, Elías Piña, Dajabón, Duarte, San Cristóbal, La Vega, Sánchez Ramírez, Monseñor Nouel y Puerto Plata, entre otras.

La quema de las sustancias se realiza cada semana en las instalaciones de la Primera Brigada de Infantería del Ejército de República Dominicana, cumpliendo con lo que establecen los artículos 33 y 92 de la Ley 50-88, sobre Drogas y Sustancias Controladas, y el artículo 26, acápite 3, de la Ley Orgánica del Ministerio Público.

Francisco Gerdo, director del Inacif, explicó que la destrucción, como de costumbre, se llevó a cabo en presencia de representantes de la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD) y del Ministerio de Salud Pública, entre otras instituciones.