POR SOILA PANIAGUA
El gobernador del Banco Central proyectó ayer un crecimiento del Producto Interno Bruto (PIB), en el primer semestre del año,  superior al 5.0%, superando las metas fijadas con el Fondo Monetario Internacional (FMI). Asimismo, Héctor Valdez Albizu manifestó que la inflación sería de un 3,10%, inferior a las proyectadas por esa institución financiera estatal.

Comentó que en el programa con el FMI se proyectó un crecimiento del PIB por el orden de los 5.5% para el año, nunca menor.

Añadió que el control de la inflación y el crecimiento del PIB se ha logrado a pesar de los efectos negativos que tiene en la economía el aumento del barril del petróleo en el mercado internacional que se ha mantenido entre los US$60 y US$70.

“No obstante, los efectos de la factura petrolera, nosotros estamos hablando de que podríamos terminar el semestre con una inflación cercana al 3.10%”, sostuvo.

En el primer trimestre del año el país creció  12.6 por ciento y en mayo pasado la inflación fue de 2.52%, explicó Valdez Albizu. Aclaró que aún no tiene el dato completo del comportamiento registrado en este mes de junio, pero adelantó que como va el comportamiento en el financiamiento bancario y la construcción, entre otros, se proyecta que el crecimiento podría ser mayor que en el primer semestre del 2005.

 Agregó que dado el control de los gastos que lleva a cabo el gobierno y la prudencia con que se está manejando la política monetaria, se espera que se cumplan a cabalidad los objetivos que se fijaron en el programa con el FMI.

“En términos de objetivos de inflación en el programa con el FMI se establece una inflación de alrededor de entre un cinco a un siete por ciento y en mayo pasado terminamos con una inflación de 2.52%. Es decir, que estamos en los lineamientos que nos hemos establecido. Estamos muy optimista”, resaltó.

Subrayó que ese crecimiento se logró pese al efecto negativo que tienen el shock petrolero y los constantes aumentos de los precios de los combustibles.