El ex baloncelista José -Piculín- Ortiz, quien fue acusado ayer a nivel federal de poseer marihuana con intención de distribuirla, fue enviado por la magistrada federal Camile Vélez Rivé a una clínica para atender un problema de adicción a drogas.

Ortiz, ex centro de la Selección Nacional, se presentó ante la magistrada Vélez Rivé tras haber sido arrestado el miércoles en una residencia alquilada en Cayey en la que le ocuparon 218 plantas de marihuana, material para procesarla y 40 municiones del calibre que se usa para los poderosísimos rifles AR-15.

La residencia ubica en el camino Las Parras en el barrio Toíta de Cayey, de donde es natural Ortiz.

El ex baloncelista presuntamente reconoció que todo el material le pertenece. La marihuana tiene un valor de $150,000 en el mercado ilegal de drogas.

El exbaloncelista se presentó en corte representado por el defensor público Héctor Ramos, debido a que alegó que no tiene dinero para costear su defensa.

De ser encontrado culpable, puede ser sentenciado a una pena que puede fluctuar entre los cinco y los 40 años de cárcel. La vista preliminar fue señalada para el 26 de julio.

En sala le acompañó su ex esposa y madre de sus dos hijos, a la cual Ortiz le preguntó por los menores. También estuvo el apoderado de los Cangrejeros de Santurce en el Baloncesto Superior Nacional (BSN), Ángelo Medina.