La Asociación Nacional de Jóvenes Empresarios (ANJE) reclamó ayer al gobierno y a los legisladores que pongan el interés del país por encima de sus intereses políticos y advirtió que las fricciones que mantienen, convertidas en discusiones públicas, dan un flaco servicio a la institucionalidad.

Richard Lueje, presidente de ANJE, planteó que cada poder del Estado debe cumplir su rol consagrado en la Constitución de la República.

Lueje indicó que es deplorable que en momentos en que la economía comienza a emerger de un período altamente crítico, los senadores se conviertan en una retranca.

“Al Poder Legislativo le corresponde conocer y legislar sobre los proyectos que sean debidamente sometidos a su consideración, procediendo a su correspondiente aprobación o rechazo en base a los méritos, no pretender bloquear iniciativas legislativas prioritarias, atendiendo intereses estrictamente particulares,” señaló.

Dijo que el Congreso no debe ser obstáculo para la aprobación de piezas legislativas relacionadas con el acuerdo stand by suscrito por el país con el Fondo Monetario Internacional (FMI).

Funcionarios del gobierno, dijo, han expresado temor de que el convenio con el FMI colapse lo que tendría graves secuelas para la economía. 

A juicio de ANJE, constituye una exhibición deprimente que los senadores decidan postergar proyectos de interés nacional como respuesta política a la supuesta persecución a que son sometidos funcionarios del pasado régimen.

“ANJE insta, tanto al gobierno como al PRD, a debatir los asuntos políticos en el plano político sin poner en peligro la institucionalidad. Asimismo, los asuntos judiciales deben estar exclusivamente en manos de la Justicia, sin que se levanten obstáculos contra los esfuerzos tendentes a que el país salga de la crisis”, dijo Lueje.

Estimó, además, que el ministerio público debe asumir su función de investigar, perseguir y sostener la acusación de todos los hechos punibles de que tenga conocimiento sin  prestarse al juego político.

Manifestó que la controversia  pública entre los legisladores y el gobierno es una mala señal para los ciudadanos que todavía creen en los procesos electorales democráticos.

“El país debe contar con una serie de objetivos que deben estar por encima de los conflictos normales que surgen entre los partidos políticos. La meta de los poderes públicos, incluyendo la justicia, debe ser el bienestar de los dominicanos, así como tomar las medidas que fueren necesarias para elevar los niveles de competitividad dentro de un marco de seguridad jurídica y seguridad ciudadana”, dijo el presidente de ANJE.

Consideró que la prioridad nacional debe ser la elaboración de una agenda coherente en la que se le dé participación a todos los sectores y que se establezca la estrategia de desarrollo de la República Dominicana, para elevar los estándares de vida, en particular la educación, la salud, la vivienda, la alimentación y el medio ambiente.