República Dominicana debe apostar a nuevas tendencias mundiales del sector turístico e incursionar en nuevo nichos como el turismo rural e industrial, además fortalecer el turismo cultural y gastronómico, los  atraen a turistas que gastan más en el país.

La catedrática española Carmen María Hidalgo explicó que el turismo rural se refiere a visitar a zonas rurales para tener un contacto con esas comunidades; este permite el desarrollo económico de estas y hace que agricultores y ganaderos se beneficien. Mientras el turismo industrial consiste en visitar industrias o empresas emblemáticas que existen o existieron, como es el caso de ingenios abandonados en el país.

 “No serán flujos de turismo tan importantes como los de sol y playa, sino productos complementarios que además favorecen el desarrollo de comunidades y es un turismo de mayor impacto económico, porque estos turistas tienen más capacidad adquisitiva”, expreso Hidalgo, quien es además directora del Departamento de Turismo de la Universidad a Distancia de Madrid (Udima).

Consideró que el país tiene que plantearse dos estrategias principales, la primera es continuar con el turismo de sol y playa, y la segunda es explotar el gran potencial cultural y natural del país, que consideró es extraordinario.

Hidalgo destacó que en España el turismo rural e industrial ha tenido muy buenos resultados, tanto para turistas extranjeros como los españoles y ese ejemplo puede funcional muy bien en otros países.  

Zoom

Seminario

Hidalgo ofreció estos detalles durante su conferencia “La situación actual del turismo a escala mundial. Estrategias para el Siglo XXI”, durante un seminario celebrado ayer por la  La Universidad Central del Este (UCE) y Udima. Además expusieron  Luis Felipe Aquino de la Universidad Apec,  Mónika Infante de Aerodom, Lissette Gil de CDCT y Elizabeth Tovar de Opetur.