Pide al gobierno seriedad en ayuda a damnificados

Pide al gobierno seriedad en ayuda a damnificados

El arzobispo de Santiago, Ramón de la Rosa y Carpio, consideró anoche que «parte el alma» los casos de familias damnificadas en esa provincia por las inundaciones recientes, por lo que pidió al gobierno que asuma seriamente la ayuda y que no sólo haga promesas para salir en periódicos o en la televisión.

A pesar de la crisis económica, sostuvo, el gobierno puede tener los recursos necesarios para resolver esos casos.

Señaló que la vida familiar se ha visto interrumpida en muchas comunidades de Santiago, manifestada en el sufrimiento de niños, mujeres y hombres.

De la Rosa y Carpio fue entrevistado luego de participar en una conferencia en la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM), pronunciada por el arzobispo John P. Foley, presidente del Pontificio Consejo para las Comunicaciones Sociales de la Santa Sede.

«Nosotros sentimos el dolor y es impactante haber visto casas prácticamente flotando en los ríos. Después, la destrucción registrada en toda la agricultura, esas son escenas que le producen a uno mucho sufrimiento», manifestó.

El gobierno, dijo de la Rosa y Carpio, con esta experiencia debe sacar la conclusión de poder prever. Muchos de esos sufrimientos humanos, agregó, se pueden evitar si no se permite que se construya en los alrededores de cañadas o ríos.

También sugirió establecer controles para determinar cuáles son los verdaderos damnificados. Recordó los casos de personas que han traficado con viviendas luego de desastres, cuando tras ser beneficiadas con una casa, las venden o alquilan para volver a vivir a orillas de ríos o cañadas.

«Creo que estas son ocasiones en las que el gobierno debe dar soluciones serias y que los políticos no aprovechen la miseria humana para ofrecer una construcción donde no se debe hacer», expresó.

Insistió en que en las parroquias es donde los sacerdotes reciben primero las quejas de las necesidades y ayudan en lo que pueden.

«El martes por la noche, frente a un puente que comunicaba a Gurabo con el resto de Santiago se cayó por vicio de construcción, pues el párroco de la zona, a las 10:00 de la noche, tuvo que ir a acompañar a todas esas familias que estaban golpeada por la situación», dijo.

«Es bueno que el gobierno asuma ahora su responsabilidad y es necesario que lo haga frente a los damnificados, pero que lo haga seriamente», insistió. Planteó que no sólo sea una solución coyuntura, sino de futuro.

[b]CRISIS PROFUNDA [/b]

Cuando no se ve quienes están dirigiendo esta «barca», dijo, entonces se pesca en mar revuelto y en los negocios, con la especulación, es donde más se pierde el sentido de la moral y del bien común por la falta de la aplicación de control de precios.

Cree que el país necesita tener señales claras de que sus dirigentes están al frente de la situación actual, conduciendo sobre todo, la crisis económica, que ahora, dijo, es también crisis política.

«En una democracia como la nuestra, que se fundamenta en partidos políticos, cuando la gente ve que sus líderes están divididos entre ellos, se pregunta )Y quién se ocupa de nosotros, quién piensa en nosotros? Y de ahí nace la frustración», añadió.

Entiende que pese a la situación que se vive el pueblo dominicano siempre tiene sueños y esperanzas. «A pesar de todos esto que nos envuelve, seguimos esperando que saldremos a camino».

[b]FALTA DE DIRECCION[/b]

«Es la falta de dirección, cuando las autoridades, que no sólo es el gobierno central porque son muchas las autoridades que tenemos y que tienen responsabilidades, y cuando las autoridades ponen mano en eso las cosas se controlan», respondió a la pregunta de las alzas en los productos básicos.

Recordó que a principio de 1990 se vivió un «descontrol enorme de precios», y que cuando las tomaron medidas todo se controló.

[b]SITUACION MONTECRISTI[/b]

El corresponsal Pwedro Ureña reportó desde Montecristi que cuatro personas murieron ahogadas, hay 25 mil refugiados, 5 mil viviendas semi-destruidas, daños a la agropecuaria y poblados incomunicados, era el resultado hasta anoche de las inundaciones registradas en esta zona por la crecida de ríos y arroyos.

Los muertos son Henry Minaya, Roberto Cruz, el haitiano Marcelino Pié y otro cuyo nombre se desconoce, según informó Máximo Ventura, director provincial de la Defensa Civil, quien informó que se mantiene el alerta roja en todo el Noroeste.

Dijo que el tránsito entre este municipio, Dajabón, Loma de Cabrera, Restauración, Pepillo Salcedo y otros poblados fronterizos quedó interrumpido debido a que el puente sobre el río Yaque, localizado en la comunidad de La Peña, fue barrido por las aguas.

Las plantaciones de yuca, guineo, plátanos y otras fueron arrasadas por las aguas, mientras que unas 46 reses fueron arrastradas por las crecientes de ríos y arroyos en la zona de Guayubín, comunicó Felicia Castillo, ex cónsul en Juana Méndez.

[b]HABLA ELIGIO JAQUEZ[/b]

El corresponsal Anselmo Silverio informó desde Santiago que el secretario de Agricultura detalló que las inundaciones por el desbordamiento de ríos y arroyos provocaron daños superiores a los mil millones de pesos, especialmente en las plantaciones de arroz del Nordeste y el Noroeste.

Anunció, asimismo, que hoy el presidente Hipólito Mejía realizará un recorrido por las zonas devastadas por las aguas, en compañía de funcionarios del equipo agropecuario del gobierno.

Jáquez comunicó que en materia de producción arrocera los daños causados por las aguas son, a la fecha de 970 mil quintales.

El funcionario fue entrevistado en el Instituto Superior de Agricultura {ISA} donde firmó varios convenios de colaboración con universidades y escuelas de agronomía de distintas regiones del país.

Publicaciones Relacionadas

Más leídas