El ex secretario de Agricultura propuso hoy que el equipo negociador del Estado Dominicano, en el Tratado de Libre Comercio con los Estados Unidos, evalúe correctamente cuáles son las implicaciones que tiene ese tratado para el sector agropecuario nacional y clamó por una mayor participación del sector agrícola en esas discusiones.

El ingeniero Amílcar Romero P. señaló que el país no tiene capacidad para mantener políticas de subsidios como los que tienen otras naciones más desarrolladas como los Estados Unidos y la Unión Europea, lo que quiere decir que en ese aspecto tenemos ciertas desventajas para ser competitivos.

«No podemos ser competitivo siempre y cuando haya la protección que tienen los productores de esos dos grandes comercios», agregó.

Romero, ex candidato vicepresidencial del Partido de la Liberación Dominicana, dijo que no ha habido, por el momento, ninguna señal que refleje que ellos puedan rápidamente disminuir el nivel del subsidio que tienen a los sectores agropecuarios de esos dos grandes bloques comerciales.

Exhortó a los negociadores, al Estado Dominicano, a la Secretaría de Estado de Agricultura y a la propia Industria y Comercio a que pongan su atención en aquellas cosas que puedan perjudicar al sector agropecuario y que indudablemente puedan dar al traste con la actividad agrícola de nuestra Nación.

Romero dijo entender que debe haber un mayor nivel de participación del sector agropecuario nacional en las discusiones, porque si bien es cierto que el balance total puede ser beneficioso para la República Dominicana, también puede ser perjudicial y en desmedro de los que son los productores agropecuarios nacionales.

Estimó que indudablemente hay aspecto que favorecen las actividades económicas del país, la industria, la zona franca y otros que necesariamente tienen que evaluarse como lo es el caso del sector Agropecuario.

Sostuvo que como país conseguimos proteger unos 8 productos agropecuarios que son sensibles, como lo es el caso del arroz, el pollo, la cebolla, el ajo, el maíz, y otros que necesariamente tienen que estar protegidos por el aspecto social que está envuelto en ellos y por la contribución que tienen al producto bruto interno.