La Federación Dominicana de Comerciantes (FDC) sugirió que la reforma fiscal conlleve un ajuste del poder de compra de los consumidores. La FDC, al fijar su posición pública sobre la reforma fiscal, explicó que ese ajuste en el poder de compra debe hacerse a través de un aumento general de salarios.

La federación que agrupa a varias asociaciones de comerciantes dijo que «no podemos permitir que el nivel de la calidad de vida siga deteriorándose como lo ha hecho en el 2004».

La FDC también reclamó que la reforma debe contemplar la eliminación del «anticipo» del 1.5 por ciento sobre las ventas brutas, ya que ha sido uno de los factores más importantes para la descapitalización del comercio nacional».

«En el país existen aproximadamente 85,000 unidades de negocios comerciales que con bajos márgenes de intermediación laboran más como centro de autoempleo personal y familiar».

Dijo que ese impuesto aumenta considerablemente el riesgo de quiebras de los pequeños comercios cuyos márgenes de intermediación sean equivalentes a una ganancia menor de las ventas brutas».

También objetó el establecimiento de un impuesto de uno por ciento a los locales utilizados por el comercio.

Consideró que ese impuesto provocaría un conflicto con casi el 90 por ciento de los locales de negocios pequeños que son también utilizados como viviendas, y probablemente el 50 por ciento tenga un valor mayor a 3.0 millones de pesos.

«El impacto sería catastrófico, ya que los pequeños y medianos comercios sin contabilidad organizada y que no declaran sobre la renta, no podrán deducir este impuesto como gasto, por lo que las ganancias se reducirán en esa misma magnitud, provocando mayores riesgos de quiebra generalizada en el sector», advirtió la FDC.