La actual  crisis alimentaria  hay que enfrentarla   con  más salud y educación, servicios que deben ser prestados en el contexto de un plan de desarrollo, de acuerdo al  economista Pavel Isa Contreras, oficial nacional del  Programa de Alimentos de las Naciones Unidas.

Al tratar  el tema   cómo enfrentar la actual crisis alimentaria, durante su participación  en el panel  “Retos de la Economía Dominicana ante el Shock  Externo  y el Déficit Fiscal”, organizado por la sección económica del periódico HOY,  donde también participaron  el economista José Luis de Ramón,   José Antonio Vanderhorst Silverio, especialista en tema eléctrico, Isa Contreras entiende  que esa provisión de servicios necesita de  perspectivas de nación que le permitan  al país enfocarse hacia dónde quiere ir. Fruto de ese plan de desarrollo, cree que en el país debe hacerse proyecciones futuras con cuestiones relativas a cómo bajar la mortalidad materna, la infantil, la subnutrición. “Esos son los objetivos que tenemos que establecer y en función de eso armar toda las políticas. Pero para eso necesitamos infraestructura de este tipo, un estado que provea estos tipos de bienes”, afirmó.

Puntualizó que el país desde hace tres meses  está enfrentando presiones muy fuertes para cambiar de una situación alimentaria de cierto nivel a una situación alimentaría más precaria, especialmente para la población más pobre.

Dijo que esa actual coyuntura ha provocado que “productos problemas” como  el pan, las pastas, el pollo, los huevos, los aceites vegetales y la leche, los cuales son los principales alimentos de los dominicanos y que aportan   el  65 por ciento de la proteína que consumen hayan sufrido un fuerte aumento en sus precios.

Señaló que desde noviembre del año pasado el  aumento  promedio de los precios internacionales de los alimentos ha sido de un 60%. En los casos más dramáticos están las grasas y aceites comestibles,  los cuales han aumentado más del doble, y los cereales  un poco menos que el doble.

 En tanto los lácteos han  incrementado su precio en alrededor de un 50%, las carnes en un 10%. En ese sentido, dijo que “se está hablando de un cambio dramático en el nivel de precios, en la situación alimentaría en todo el mundo”. Dijo que esos aumentos afectan a un 36% de la población dominicana, ya que de acuerdo a estadísticas tres millones de habitantes son pobres; mientra que alrededor de un 10% está muy cerca de la línea de pobreza, por no tener los suficientes ingresos para adquirir una canasta alimentaría básica.

Isa Contreras dijo que a esa cantidad hay que añadirle que el   29 por ciento de la población  dominicana está subnutrida, o sea, que no ingiere las  1,920 calorías  que por día debe ingerir un ser humano, de acuerdo a los parámetros internacionales. Puntualizó que estos datos corresponden a estadísticas del año 2003 dadas a conocer por la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO).

Isa Contreras concluyó su exposición destacando que  en el país la  primera línea de defensa para afrontar la actual crisis alimentaría debe empezar por el sector salud, sector que ha sido descuidado.