CARACAS (AFP).- Venezuela exigió ayer, martes, a Bogotá que aclare las afirmaciones del ministro del Interior de Colombia, quien aseguró que el presidente electo de Ecuador, Rafael Correa, cambió de parecer y canceló una visita a Bogotá tras reunirse con el presidente Hugo Chávez.

“Hemos expresado nuestro rechazo y disgusto por esta declaración a la cancillera colombiana, María Consuelo Araújo”, dijo el canciller Nicolás Maduro a periodistas.

“Aspiramos a que de manera muy pronta haya una aclaratoria sobre este tema”, agregó el canciller.

Maduro detalló que conversó ayer, martes, vía telefónica con Aráujo: “Hemos pedido a la cancillera un pronunciamiento para aclarar esta situación, dado que es un funcionario del más alto nivel del gobierno colombiano”.

El pasado jueves, luego de reunirse en Caracas con Chávez, Correa desistió de viajar a Bogotá, donde tenía previsto reunirse con el mandatario colombiano, Alvaro Uribe, en represalia por la reanudación de las fumigaciones antidrogas en la frontera colombo-ecuatoriana.

El ministro del Interior de Colombia, Carlos Holguín, dijo el viernes a Radio Caracol: “Parece que hubo un cambio de actitud en el presidente Correa entre lo que conversó con el presidente Uribe el domingo pasado y la posición que asumió con posterioridad a su entrevista con el presidente Chávez”.

Maduro sostuvo que el “ataque al jefe de Estado venezolano es una doble ofensa”, a Venezuela y a Ecuador. Correa es “un líder, un dirigente, un jefe político recién electo por el pueblo de Ecuador y toma sus propias decisiones”, dijo el canciller venezolano.

“Esta expresión del ministro del Interior colombiano, que rechazamos absolutamente, nos parece una actitud que no se corresponde con las relaciones de amistad y de respeto” entre los gobiernos de Venezuela y Colombia”, puntualizó Maduro. Venezuela “espera que no se repitan estas circunstancias”, añadió Maduro.

Las fumigaciones aéreas de cultivos de coca en la frontera es un tema que mantiene en crisis las relaciones diplomáticas colombo-ecuatorianas desde el 18 de diciembre.

Chávez se reunió el jueves con Correa, un economista de izquierda, cuando se solidarizó con su reclamo a Bogotá de cesar las aspersiones con el herbicida glifosato por considerarlas nocivas para la salud y el medio ambiente. “Colombia debe buscar otros métodos” para evitar los cultivos ilegales, opinó Chávez.