POR EVARISTO RUBENS
Directivos de la Asociación Nacional de Fabricantes de Dulces y Afines (ASODULCES) pidieron un acuerdo para cubrir el déficit de azúcar en el mercado interno, proyectado para el próximo año 2007. El presidente y el director ejecutivo de ASODULCES, Jesús Moreno y César Heredia, afirmaron que los integrantes de esa entidad y los productores de azúcar están obligados a ser aliados y a tener buenas relaciones.

Dijeron que los industriales no quieren que la falta de suministro de azúcar y los altos precios de ese producto, los ahoguen y tengan que cerrar sus empresas.

Moreno y Heredia, quienes fueron entrevistados en el encuentro económico de Hoy, manifestaron que como dirigentes de ASODULCES lo que les interesa es mantener buenas relaciones con los productores de azúcar, ya que ambos se necesitan.

Manifestaron que el pasado 28 de julio ASODULCES envió una carta al vicepresidente de finanzas del Central Romana, Irvin Redondo, “con el objetivo de darle a conocer las necesidades para el suministro de azúcar por parte del sector azucarero a nuestros socios de la industria del dulce”.

“Estamos sometiendo a su consideración el listado de miembros de ASODULCES que mayor demanda tiene de azúcar, a fin de que la misma sea satisfecha en la medida de las posibilidades del Central Romana, todo a partir de los inventarios de almacén que dicha empresa disponga en azúcar refino o pardo”, dicen en la carta.

Agregan que “en el listado anexo hay empresas afiliadas cuya demanda está satisfecha, pues desde hace tiempo tienen asignado un código para el suministro de azúcar en el Central Romana y que estos sólo figuran para evidenciar el volumen de nuestro sector industrial”.

Añaden que “en tanto, hay socios que no tienen las facilidades de suministro directo de azúcar, por lo que estamos formalmente solicitando la activación de un código a su favor o a favor de ASODULCES, como entidad coordinadora para satisfacer las demandas comunes de sus afiliados, cuyo número es mayor al listado presentado, pero como muchos de ellos están ubicados en la categoría de mediana y pequeña empresa es menor, y por tanto tienen que acudir a difíciles y costosos canales de distribución en el mercado azucarero, siendo una meta el ASODULCES el superar esas dificultades de estos socios”.

En tanto, dijeron,  el Central Romana respondió el 3 de agosto último la misiva a ASOCULCES, en la que expresa que “por este medio le remito el listado de los clientes que actualmente son servidos por esta empresa (con su código asignado), tanto del azúcar crema como de refino, así como aquellos que actualmente no cuentan con el mismo”.   

Señala que “es importante hacerle notar que los clientes que actualmente tienen códigos de retiro están solicitando cantidades que no se compadecen con las que han venido retirando según nuestros datos como promedio semanal durante los años 2005 y 2006”.

Indican que “usted como conocedor de la industria azucarera entenderá que esta empresa ha venido realizando estos despachos de acuerdo a nuestras posibilidades”.

Añade el Central Romana que “en el caso de las empresas que no cuentan actualmente con código, favor requerirle a las mismas una comunicación solicitando la asignación de un código y de sus necesidades, las cuales serán atendidas bajo las mismas condiciones anteriormente expuestas”.

Moreno y Heredia explicaron que la situación del suministro de azúcar en el país es difícil que se pueda resolver con la producción local.

Señalaron que el sector productor arrendatario de los ingenios del Consejo Estatal del Azúcar (CEA) prácticamente ha colapsado.

De todas esas empresas, sólo una (el ingenio Barahona) se mantiene con producción estable.

Expresaron que el vacío de producción dejado por los ingenios arrendados, no ha podido ser suplido por los ingenios del Central Romana y los Vicini, porque éstos han llegado a los techos de producción.  

Los directivos de ASODULCES manifestaron que las necesidades de azúcar en el país han aumentado, en especial de refino, porque es la de mayor uso por el sector industrial.

Dijeron que la demanda aparente del país es de unas 370,000 toneladas métricas de azúcar (180,000 de refino y 190,000 pardo) anual.

Indicaron que para la próxima zafra la producción de azúcar sería de 480,000 a 490,000.

De esas se exportarán 234,000 toneladas métricas al mercado preferencial norteamericano, lo que significa mas de la mitad de la producción y agravaría el déficit del mercado interno, explicaron.

Precisaron que si se exporta esa cantidad de crudo a Estados Unidos, la población se irá al consumo masivo de azúcar refino, pero que como el país tiene una producción fija de 160,000 toneladas de refino, volverá a producirse escasez de ese tipo del dulce.

Consideraron que frente a esa situación, las autoridades deben establecer un contingente de importación para el próximo año, sobre una base justa y transparente.