La entidad católica reconoce la falta de sólidos interlocutores del lado haitiano, por lo que recomienda se busquen a los obispos establecidos en la zona fronteriza

El cierre de la frontera con Haití, por la canalización del río Masacre por parte de empresarios haitianos, también provocó la reacción de la alta jerarquía de la Conferencia del Episcopado Dominicano (CED), la cual entiende que bajo ningún concepto la acción de aprovechamiento de las aguas por parte de los haitianos puede ser motivo de un conflicto bélico entre dos naciones que están llamadas a vivir en paz, cooperación y en armonía.

Monseñor Faustino Burgos Brisman, secretario general de la Conferencia del Episcopado Dominicano, hablando a nombre del presidente de esa entidad Monseñor Héctor Rodríguez, expresó también que es desafortunado que no exista del lado haitiano alguna autoridad con la cual se pueda dialogar, pero pese a todo esto debe primar el conversar.

“Personalmente pienso que el cerrar la frontera de una manera contundente, tiene sus pro y sus contra, quizás más cosas en contra, porque realmente hay un comercio ilegal que se explota y se fortalece, mientras un comercio que pudiera ser legal, a través del pago de impuestos en aduanas, no se realiza”, consideró Burgos Brisman.

El obispo expresó que como representantes de la iglesia católica dominicana están abogando porque quienes están involucrados en el conflicto, de aquel lado de la frontera, puedan sentarse en la mesa del diálogo. “Claro, pudiera uno pensar o decir: que son turbas con personas que usan la violencia. De todas maneras, hay que hacer los esfuerzos. Para eso está la diplomacia y el advenimiento”, agregó.

A juicio de Monseñor Burgos Brisman, en la parte de Haití aparecen buenos interlocutores de los cuales se pueden seleccionar para iniciar la búsqueda a una salida, como pudiera serlo el obispo que reside en la zona.

“Toda esta alharaca y todo este despliegue de fuerzas militares del otro lado y de este lado, no tiene sentido. No es para tanto. Es la realidad. Hay que buscar también la opinión de los expertos en ambas partes para que puedan orientar sobre lo mejor que conviene en un acuerdo satisfactorio”, puntualizó el líder espiritual católico.

Desde las 6 de la mañana del pasado viernes el presidente de la República Luis Abinader dispuso cerrar todos los pasos de la frontera (terrestre, marítima y aérea) en respuesta a la desviación de las aguas del Río Masacre por parte de los haitianos, medida que se prolongará de manera indefinida. Un gran despliegue de militares se mantiene en alerta en la zona para resguardar cualquier situación en los puntos fronterizos.