BONAO. Familiares de un empresario mecánico que fue secuestrado, torturado y asesinado, y su cadáver encontrado en estado descomposición en septiembre de este año, pidieron al procurador general de la República, doctor Radames Jiménez Peña y al jefe de la Policía Nacional, mayor general Rafael Guillermo Guzmán Fermín, disponer una minuciosa investigación sobre este crimen.
Juan Suriel Hernández, de 61 años de edad, fue secuestrado a punta de pistola en su negocio, en el kilómetro 60 de la autopista Duarte, por tres desconocidos que viajaban en una yipeta color negro.
El día 27 de agosto, ocho días antes de su muerte, desconocidos habían asesinado de un cartuchazo a su hijo Andy Suriel, de 21 años, en el distrito municipal El Puerto, de Villa Altagracia. El cadáver del empresario fue hallado en unos matorrales próximo al río Yuboa, del municipio de Piedra Blanca en estado de descomposición con un tiro en el cráneo.