Para los directivos de la Asociación de Suplidores de Materiales Eléctricos (Asume) en República Dominicana se ha dado un buen paso con el inicio del proceso de homologación de las normas con el Código Eléctrico Nacional, pero este debe ser objeto de modificaciones para hacerlo más efectivo.
Edmundo Delmonte, presidente; Benito Olmos Contreras, vicepresidente, y Gustavo J. Núnez, tesorero de Asume, dijeron que una de las quejas que ha presentado esa entidad a la Superintendencia de Electricidad (SIE) es la necesidad de homologar normas para el uso de los materiales eléctricos que se comercializan en el mercado local, de manera que estos se rijan por una ficha técnica, como corresponde y se hace en otros países.
Afirmaron que Asume lleva años luchando para que esa iniciativa sea una realidad, al puntualizar que la falta de homologación se da en algunos renglones de productos.
Indicaron que no solo se han acercado a la SIE, sino también al Instituto Dominicano para la Calidad (Indocal) para darles todas las referencias necesarias, tomando en cuenta los conocimientos y capacitaciones en la materia que poseen como profesionales de la ingeniería eléctrica.
Dijeron que debido al estudio para el diseño del Código Eléctrico Nacional que se implementaría en el país el inicio del proceso de homologación se detuvo.
Lamentaron que no le dieron participación a Asume para la elaboración del Código Eléctrico Nacional, por lo que según informaciones este no ha sido aprobado oficialmente porque no está claro en algunos aspectos.
Por tal motivo, enfatizaron que esa entidad sigue luchando para que se hagan los cambios que se requieren en el código y la homologación de modo que se cumpla con las fichas técnicas.
Explicaron que en el país se trabaja con diferentes parámetros porque en el mercado hay productos de Estados Unidos y de Europa, además de que llegan materiales falsificados de China, es decir que no hay un sistema de medidas definido, lo cual provoca muchos inconvenientes en el sector eléctrico.
Resaltaron que con el código una de las prioridades que quedarían resueltas es la definición de un sistema de unidades, de modo que haya homologación de normas.
Revelaron que mientras tanto, en el país se trabaja con en base al código eléctrico de Colombia.
El objetivo del código es la salvaguardia de las personas y de los bienes contra los riesgos que pueden surgir por el uso de la electricidad.
El mismo debe contener las disposiciones que se consideran necesarias para la seguridad. El cumplimiento de las mismas y el mantenimiento adecuado darán lugar a una instalación prácticamente libre de riesgos, pero no necesariamente eficiente, conveniente o adecuada para el buen servicio o para ampliaciones futuras en el uso de la electricidad.
Dentro de los riesgos, se pueden resaltar los causados por sobrecarga en instalaciones eléctricas, debido a que no se utilizan de acuerdo con las disposiciones de este código. Esto sucede porque la instalación inicial no prevé los posibles aumentos del consumo de electricidad. Una instalación inicial adecuada y una previsión razonable de cambios en el sistema, permitirá futuros aumentos del consumo eléctrico.