La Asociación Nacional de Jóvenes Empresarios (ANJE) pidió a la Cámara de Diputados la posposición del conocimiento del proyecto de Ley Sectorial de Areas Protegidas, por considerar que debe ser objeto de una mayor ponderación de parte de todos los sectores nacionales.

Manuel Diez Cabral, presidente de ANJE, dijo que es necesario que antes de convertir en ley dicha pieza, se proyecten y analicen cuidadosamente las repercusiones de carácter ambiental y social que el mismo provocaría.

«Sin entrar en consideraciones sobre los aspectos negativos del referido proyecto de ley, pues los mismos deben sopesarse cuidadosamente», dijo Diez Cabral, tras advertir que una vez aprobado, sus consecuencias podrían ser irreversibles.

Consideró que sería un desacierto de los legisladores, la aprobación definitiva de un proyecto de tanta importancia como el de referencia, sin analizar previamente sus consecuencias y sin haberse explicado a la ciudadanía el alcance del mismo.

El proyecto comentado por el presidente de la ANJE, fue aprobado recientemente en el Senado y actualmente se encuentra bajo estudios en la Cámara de Diputados.

Advirtió que la República Dominicana, al encontrarse insertada cada día más dentro de esquemas de libre comercio, debe ponderar seriamente este tipo de leyes, “ya que algunos tratados firmados por nuestro país, como el reciente pacto acordado con Estados Unidos, establecen cláusulas que regulan aspectos ambientales y que pudieran entrar en contradicción con lo establecido en el proyecto de Ley Sectorial de Areas Protegidas”.

Dijo no entender la urgencia en el conocimiento de este proyecto, pues señaló que si lo que se quiere es fomentar el turismo, “primero, deben hacerse muchas otras cosas en las áreas que ya tenemos hábiles y que no están suficientemente organizadas y explotadas”.

Entre ellas citó la necesidad de estabilizar el suministro eléctrico, la creación de infraestructura en las zonas aledañas a los puntos turísticos más relevantes, la coordinación y participación de las autoridades en la promoción del país en el exterior, la organización de proveedores de servicios complementarios, la estabilidad en las normas impositivas y la educación a la población que circunda los centros turísticos.

Añadió que las modificaciones a asuntos tan importantes como la reducción de las áreas protegidas, deben estar enmarcadas dentro de la discusión y el consenso de la necesaria agenda nacional de desarrollo, reclamada por ANJE durante muchos años.