Piden Procuraduría actúe por importación delfines

Piden Procuraduría actúe por importación delfines

POR ODALIS MEJIA
La Academia de Ciencia demandó de la Procuraduría para la Defensa del Medio Ambiente actuar sin dilación en el  caso de la importación de cuatro delfines hace unos 10 días  por la empresa Parques Tropicales, ya que constituye una violación a la Ley 64-00, por lo que debe ser sometida a la justicia.

En rueda de prensa, el presidente de la Academia, Nelson Moreno Ceballos, el consultor legal, Juan Frías, y la presidenta de la Fundación Dominicana de Estudios Marinos, Idelisa Bonnelly, recordaron que en 2002 Manatí Park, subsidiaria de Parques Tropicales,  realizó una captura ilegal y sometió al cautiverio a varios delfines,  por lo cual se iniciaron acciones judiciales.

No obstante, resaltaron que la Procuraduría de Medio Ambiente de entonces “engavetó” el expediente sin ofrecer ninguna explicación legal, por lo que calificaron el caso como un acto se denegación de justicia.

En esta ocasión,  Frías señaló,  que el procurador de medio ambiente debe iniciar las  investigaciones, puesto que se trata  de un  delito de carácter económico, los cuales “tienden a evadirse con mucha facilidad” porque en   los tribunales se caen “muchos expedientes por la tardanza de la investigación”.

Bonnelly explicó que los delfines son especies amenazadas que están reguladas y protegidas por convenios internacionales asumidos por el país y para cuyo comercio se requiere de un permiso de importación, que no ha sido otorgado por las autoridades, por lo que los delfines traídos son ilegales.

Declaró que Manatí Park tiene un historial de maltratos y muertes de esos animales, razones que llevaron el pasado año a la Secretaría de Medio Ambiente a negarle el permiso de importación de delfines.

 “Son argumentos muy sólidos por la cual se prohibió la importación de manera que estamos al frente a una empresa que de nuevo viola y trae inconsultamente esos delfines”, expresó.

Bonnelly denunció que no existe una  vigilancia estricta en torno al uso de los delfines para la diversión en lugares turísticos y que muchos  accidentes  no son reportados  por los administradores de los parques.

Dijo además que los estanques en que son exhibidos los delfines  son muy pequeños, por lo que tanto los desperdicios naturales de las personas y los animales enturbian rápidamente las aguas  lo que tiende a ser un foco de contaminación.

Indicó además que en los estanques se tiene que usar mucho cloro lo cual irrita la piel y los ojos de los turistas y de los animales.

Los delfines se encuentran en el parque acuático incautados y  bajo custodia de la Secretaría de Medio Ambiente. De acuerdo a Bonnelly la presencia de los animales es un problema  porque la Convención  Internacional para el              Tráfico de Especies Amenazadas (CITES),  plantea las posibilidades de devolución a su país de origen, la cual considera como alternativa más viable, o devolverlos a su hábitat natural, lo cual es más difícil porque conlleva un proceso de adaptación.

 Bonnelly apuntó que el  creciente consenso internacional sobre la protección de la naturaleza coloca estos casos de abusos contra el medio ambiente  en el primer punto de la agenda de las naciones interesadas en el manejo responsables y racionales de sus recursos.

  “Es oportuno advertir que los beneficios de este negocios ilegal son extremadamente lucrativos para los intermediarios y muy rentables para los delfinarios, pero resultan mortales e incosteables para la madre naturaleza”, expresaron Bonnelly y Moreno, quienes demandaron acciones de parte  del Ministerio Público.

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