Dos economistas consideraron que la estabilidad cambiaria podría lograrse si el Banco Central reduce la emisión monetaria, mecanismo que principalmente utiliza para honrar compromisos con los ahorristas de los bancos que quebraron el año pasado.

Guillermo Caram y Daniel Toribio, consultados por separado, coincidieron además en que el gobierno debe restringir sus gastos y evitar, a través de las declaraciones inoportunas de algunos funcionarios, que se perturbe aún más el mercado cambiario.

Desde el año pasado las autoridades monetarias tratan de controlar la prima del dólar, que del RD$22.00 por US$1.00 que se cotizaba en enero del 2003 cerró en diciembre de ese año al RD$40.00 por US$1.00. En las primeras semanas de febrero del 2004 la prima saltó la barrera del RD$50.00 por US$1.00, aunque en esta semana la tasa bajó hasta un RD$44.00 por US$1.00, pero de nuevo reapareció la tendencia alcista.

«Hasta tanto el gobierno no cambie radicalmente su política monetaria, hasta tanto no corte la hemorragia de financiamiento que proviene del Banco Central, para atender sobre todo el mal manejo de la crisis bancaria, no va a haber estabilidad en el mercado cambiario», refirió Caram.

De acuerdo a sus informes, del 2002 al 2003 el incremento del financiamiento del Banco Central fue de RD$103,000 millones, «y ese torrente de dinero es lo que ha causado tantas perturbaciones».

Para controlar esa emisión monetaria Caram recomendó el canje por activos, incluyendo propiedades accionarias, o traspasar al gobierno la deuda con los ahorristas, pagadera a largo plazo.

La posición de Toribio es que la estabilidad de la prima va a depender de las medidas monetarias y fiscales que apliquen el Banco Central y el gobierno.

«El Banco Central está en la obligación de secar la economía, de disminuir la cantidad de dinero que hay en circulación, porque solamente en enero del 2004 este ascendió a RD$5,000 millones, lo cual provocó un incremento de la demanda de divisas».

Otro elemento que podría incidir en la estabilidad cambiara es la recuperación de la confianza, para lo cual es conveniente la aplicación de políticas monetarias y fiscales prudentes.

[b]ALTIBAJOS DE LA PRIMA[/b]

El lunes de la semana pasada el dólar se cotizó al RD$40.00 por US$1.00, pero ya el miércoles la prima se vendía a RD$55.00 por US$1.00, con el agravante de que escaseaba.

La explicación de Caram a ese fenómeno es que se está sintiendo el efecto de la mala política tributaria y monetaria en los sectores productivos, particularmente en los exportadores, y la cantidad de divisas que genera la economía ya está empezando a resentirse.

«Lo que tenemos es una fuga de capitales que se origina cuando una economía llega a los niveles de desconfianza en que se encuentra la dominicana».

Para Toribio la fluctuación en el precio de la moneda norteamericana se debió a dos elementos principales: las demandas coyunturales como la compra de combustibles de parte de la Refinería Dominicana de Petróleo, y de los generadores de electricidad.

A su juicio el mercado cambiario es también vulnerable a las opiniones, y en ese contexto citó el rumor de que el gobierno usaría en la campaña electoral parte de los recursos entregados por el Fondo Monetario Internacional (FMI), como parte del acuerdo Stand-By.

«Eso crea nerviosismo en todos los agentes económicos y presiona la tasa de cambio», refirió Toribio.