Los detallistas de gasolina pidieron al Congreso que revise la ley que regula el negocio de los combustibles, la 112, para que los cambios de precios se hagan mensualmente.

Juan Ignacio Espaillat, presidente de la Asociación Nacional de Detallistas de Gasolina (ANADEGAS), así como Ramón Tavárez y Rafael Polanco, directivos de la entidad, explicaron que si la Ley 112 se modifica para que la revisión de precios de los combustibles sea mensual, en vez de semanal, como es ahora, «nosotros nos veríamos libres, cuatro veces al mes, de que no nos dejen desabastecidos».

Se refieren a que, según ellos, las distribuidoras de combustibles abastecen primero las estaciones propias de ellas y dejan sin combustibles o les sirven menos cantidad a las bombas de los detallistas.

La Refinería de Petróleo (REFIDOMSA) es el único agente que se opone a que la Ley 112, que es la que regula los cambios de precios de los combustibles, se modifique, sostuvieron.

Según los directivos de ANADEGAS, las distribuidoras obtienen grandes beneficios con los cambios de precios que semanalmente se producen en el mercado de los combustibles.

«Mientras nosotros, los detallistas, estamos destruidos por los cambios de precios, porque en la medida en que éstos se modifican, las distribuidoras que manejan el transporte y la venta al detalle, llenan sus propias bombas de gasolina a media noche y nos dejan desabastecidos», señaló Espaillat.

Expresó que en violación al contrato que le permite operar, una de esas distribuidoras se ha dedicado a instalar terminales de combustibles para acumular hidrocarburos. Esas terminales las mantienen llenas cuando se espera que los precios de los combustibles van a subir, como una manera de éstas conseguir jugosas ganancias, expresaron los directivos de ANADEGAS.

Presentaron las estadísticas desde la aprobación de la Ley 112, del 27 de noviembre del 2000 a esta hecha (al jueves pasado) “donde demostramos que el escalamiento de precios mensuales, son menos importantes que los escalamientos de precios semanales».

«Si usted chequea cómo los precios de la gasolina suben y bajan, se dará cuenta de que el promedio final, al cierre del mes (con excepción de los meses de diciembre del 2003 y enero del 2004) que el precio promedio cada 30 día se mantiene más o menos igual, o sea, que no oscila tanto».

Por tanto, añadió que si la revisión en cuestión se hace mensual, los incrementos de precios serían más leves.

Abogaron porque el Congreso Nacional tome las previsiones necesarias para modificar la Ley 112.

«No podemos seguir permitiendo que una licencia dada por el gobierno a empresas para que hagan comercio, se convierta en un instrumento destructor de la sociedad», dijo el ingeniero Espaillat.