El señor Fidelio Despradel afirma que él no acostumbra contestar las críticas de escritores a su actuación política, pero que, en mi caso, hace una excepción porque, explica,

“…en su esencia sus palabras no me buscan a mí, sino a la figura de Manolo Tavárez … y al Movimiento Revolucionario 14 de Junio.”

El problema con esta afirmación es que Manolo y el 1J4 salen muy bien parados en mi libro La  Esperanza Desgarrada. Quien sale mal, muy mal, es Fidelio Despradel. Mi conclusión sobre el 1J4 aparece en las páginas 464 y 465 y dice así:

“Si por momentos uno y otro error parecen absurdos, prestándole un aire de farsa al relato, recuérdese que los personajes estaban luchando contra fuerzas a las que ningún hombre ‘cuerdo’ hubiera osado desafiar. AUN SI algún y otro líder resultó indigno, mezquino, envidioso o  corrupto, la mayoría de los catorcistas desafiaron la muerte y la prisión con coraje e idealismo. Sobresalieron en ese periodo de la historia dominicana, por lo que pueden servir de ejemplo a aquellos que algún día recuperarán la gloriosa bandera de la liberación nacional y de la reforma social de los combatientes del 1J4.”.

Con mucha razón Fidelio Despradel consagra su artículo, no a una defensa de Manolo y del 1J4, que no la necesitan, y mucho menos de mí; lo que él hace es una apología de Fidelio Despradel.

Despradel afirma también que él duda que me concediera una entrevista. No me ofende que se haya olvidado de ella. No fue una entrevista de mayor importancia, sino bastante superficial, y es por esto que me refiero a ella una sola vez en todo el libro. Lo que es curioso sin embargo, muy curioso  por cierto, es que Despradel afirme que Gleijeses “se apoya en esta entrevista para confirmar muchas de las peregrinas afirmaciones que hace en su libro.” Esta afirmación está tan lejos de la verdad, y de lo que dice La Esperanza Desgarrada, como la afirmación anterior de Despradel de que mi libro es un ataque a Manolo y al 1J4. Lo que digo de Fidelio en La Esperanza Desgarrada está basado en entrevistas con una larga serie de participantes en aquella lucha y en documentos del propio 1J4.

Me parece inútil tener un debate con un individuo que transforma a su antojo, y con bastante descaro, lo que yo digo. Por ende considero que lo más práctico es que cualquier persona que tenga interés en este tema lea La Esperanza Desgarrada, vea lo que digo de Manolo, del 1J4 y de Fidelio Despradel, y saque sus propias conclusiones.