Santiago de Chile, (EFE).- El presidente de Chile, Sebastián Piñera, llamó hoy a los convocantes a un paro nacional el miércoles y jueves de esta semana, a «dejar el camino de la intransigencia y retomar el del diálogo».

 «Estamos conscientes de que nuestro país tiene muchas deudas pendientes, que hay muchos problemas que aún no han sido resueltos y nuestro Gobierno es el primero en reconocer esta realidad y el que más interés tiene en resolver los problemas que se arrastran hace tanto tiempo», sostuvo el mandatario.

La Central Unitaria de Trabajadores (CUT), la principal multisindical chilena, con el respaldo de unas 80 organizaciones sociales, estudiantiles, gremiales y políticas, convocó a un paro nacional de dos días bajo una amplia gama de demandas, que abarcan desde cambios a la Constitución hasta una subida de impuestos a las empresas.

En ese marco, Sebastián Piñera emplazó «a todos los chilenos», y especialmente a quienes ejercen cargos de liderazgo, a tener buena voluntad y espíritu constructivo para lograr acuerdos. «Estos son tiempos en que se requiere de unidad y no división, de colaboración y no de enfrentamiento», subrayó, durante la inauguración de nuevos equipos en una fundación dedicada a la lucha contra el cáncer.

Piñera dijo percibir «una dolorosa contradicción», al ver que «mientras tantos chilenos, incluyendo el Gobierno, se empeñan para que con esfuerzo, trabajo y voluntad Chile avance, haya otros que también se esfuerzan y luchan precisamente por lo contrario, por paralizar nuestro país y hacerlo retroceder». El mandatario se preguntó si es ese el camino que permitirá enfrentar y resolver los problemas y se respondió que está seguro de que «los hombres y mujeres de buena voluntad saben perfectamente que no».

Admitió que muchas de las causas por las que luchan quienes están movilizados son «justas y nobles», pero recalcó que «la vía de la violencia no es el camino». «Así no vamos a avanzar hacia el país más próspero, justo y solidario, que es el que todos queremos», enfatizó el mandatario conservador que insistió en su llamado a la unidad de los chilenos. Llamó además a que «manteniendo nuestras legítimas diferencias abandonemos el camino de la violencia y resolvamos nuestros problemas en paz, especialmente ahora en que se vislumbran grandes nubarrones en la economía mundial». EFE