RIO DE JANEIRO. Gerard Piqué es el jugador español más mediático en Brasil-2014. Su relación sentimental con la cantante colombiana Shakira le ha hecho el más popular en los entrenamientos de la Roja. Contra Holanda en el debut (derrota por 5-1) no estuvo fino.

Frente a Chile será mirado con lupa. En los entrenamientos de la selección española, los medios de comunicación brasileños siguen las evoluciones de Piqué, igual que el público, como si de una estrella de cine se tratara.

Y los aficionados brasileños también se sienten atraidos por la figura del barcelonista, como ocurrió el pasado 10 de junio cuando al término de un entrenamiento en Curitiba, un pequeño aficionado, Vinicius dos Santos de Moura, de 15 años, se zafó de las medidas de seguridad, se coló por un hueco debajo de la valla y se fue donde Piqué, que le regaló su camiseta.

Vinicius escenificó una escena que fue la envidia de muchas adolescentes brasileñas que estaban en aquel entrenamiento, el único abierto al público hasta el momento de la selección española en Brasil-2014. Muchas de ellas acudieron al entrenamiento con camisetas y fotografías de Piqué.

Si las cosas le van bien a Piqué a nivel de popularidad en el Mundial, no le sonríen tanto a nivel deportivo. Vicente del Bosque ensayó toda la semana previa a la humillante derrota de España en su debut en el Mundial contra Holanda (5-1) la composición del eje central de la defensa para ver quién acompañaba a Sergio Ramos.

– Segundo central junto a Ramos – Del Bosque estuvo probando a Javi Martínez y a Piqué como segundo central, decidiéndose al final por el catalán para el partido contra Holanda.

Sin embargo, las cosas no le fueron muy bien, ya que no pudo sujetar a los holandeses que anotaron cinco goles. Ahora Vicente del Bosque debe elegir de nuevo la pareja de defensas y todo parece indicar que Piqué conservará el puesto a pesar de su criticada actuación contra Holanda, igual que los también mediáticos Iker Casillas y Sergio Ramos, también con famosas novias, Sara Carbonero y Pilar Rubio, respectivamente.

«A veces viene bien una hostia así. Todos hemos cometido muchos errores y me parece muy injusto centrar todas las críticas en Iker. Gracias a él no nos han metido más goles.

Nos han destrozado al contragolpe y no hemos defendido nada bien», explicó Piqué tras el partido.

Sus movimientos son seguidos tanto dentro como fuera del terreno de juego. Su actuación en el duelo contra Chile, el miércoles en Rio, será examinada por millones de personas. Una derrota enviaría de vuelta a casa a Piqué y al resto de la selección española. Solo le vale a su equipo el triunfo para seguir con vida.