Las recomendaciones a ciudadanos de que  deben portar pitos para pedir ayuda en caso de quedar atrapados entre escombros tras un  terremoto dispararon  la demanda de silbatos en tiendas de Santo Domingo. En algunos negocios se agotaron existencias.

Los frecuentes temblores de tierra han llevado el pánico a muchos dominicanos que han optado por adquirir “pitos” para avisar  en caso de quedar atrapados bajo escombros. La histeria es tal que en algunas grandes  tiendas se habían agotado esos pequeños instrumentos, cuyos precios oscilan desde 25 a  130 pesos.

En  un recorrido por las tiendas,  vendedores  coincidieron en  que las ventas han aumentado en las últimas dos semanas.

Dijeron que muchos padres van a comprar los pitos porque se los piden en los centros  donde estudian sus hijos. Otros los adquieren al alegar que han visto en la televisión avisos de orientación sobre sismos que recomiendan el uso de pitos para avisar a socorristas.

Algunos clientes compran  un pito para cada hijo, para que los usen colgados.

Manuel Nicolás y Héctor Silvestre, del Mundo del Juguete de la avenida John F. Kennedy,  afirmaron que el aumento de  venta de pitos  es notorio y que además la gente los compra para la seguridad ante robos, pues las personas pueden advertir a vecinos cercanos  con los silbidos y así alejar a los ladrones. En esta tienda había unidades disponibles.

Mientras que  en el Multicentro La Sirena  de la avenida Winston Churchill se habían agotado, según informó Ramón Polanco, empleado del área deportiva, donde se venden esos instrumentos. Coincidió en que el incremento de la demanda se ha producido en los últimos días.

En  Plaza Lama de la avenida 27 de Febrero tampoco había pitos y el vendedor Jixon Pérez informó que todos se agotaron entre miércoles y viernes, estimando en 1,500 los instrumentos vendidos  en tres días. Dijo que el lunes tendrían más en venta, pues ya se realizó un nuevo pedido.

Pánico.  Usuarios de las  redes  sociales preguntan dónde pueden adquirir los pitos,  ante el pedido que han hecho varios  colegios y según vendedores algunos clientes los compran  por decenas.

Durante el mes enero en el país se han producido varios sismos por encima de los cuatro grados, lo que ha provocado alarma, sobre todo ante las advertencias de científicos sobre el activismo que presentan varias fallas geológicas.

El 5 de enero hubo un temblor de 5.3 grados  en la falla de Ocoa que se sintió  en todo el país; el día 19 en  La Romana  hubo otro de 5 grados  y el día 23 ocurrió otro de 5.1 en Nagua, provincia María Trinidad Sánchez.  A este último le sucedieron otros cuatro movimientos más por encima de los tres grados, en la misma zona.

Los sismos de Nagua provocaron daños a 32 escuelas de  Samaná y   María Trinidad Sánchez, así como al local del Cuerpo de Bomberos.