LONDRES (EFE).- El tenor español Plácido Domingo explicó en Londres que su reciente renuncia a interpretar Parsifal es sólo momentánea y dijo que volverá a hacer ese papel cuando pueda ensayarlo el tiempo que considera necesario. Domingo tuvo que cancelar su actuación en esa ópera de Wagner en Zúrich (Suiza) el pasado 23 de abril, y se dijo entonces que el tenor español había decidido eliminar ese papel de su repertorio, algo que Domingo desmiente.
El cantante explicó a EFE que todo comenzó en Los Ángeles, el pasado diciembre, cuando, tras una producción muy estática de Parsifal, sólo pudo hacer cinco funciones al resentirse de un reflejo físico muscular y vocal.
Ese problema se complicó además con una traqueitis, que le mantuvo tres meses fuera de combate, algo que no le había ocurrido nunca.
Su queja ahora es que en los teatros donde debía representar ese papel wagneriano -Zúrich, Múnich, Berlín y Hamburgo- apenas se le concedía tiempo de ensayo con la orquesta, por lo que optó por ofrecerles una alternativa.
Actualmente, Domingo prepara en Londres Cyrano de Bergerac, la ópera de Franco Alfano basada en la obra teatral homónima del francés Edmond Rostand, que estrenó ya en Nueva York y que hace el papel 121 de su ya larga carrera operística.
Al igual que en la Metropolitan Opera de Nueva York, Domingo actuará en el Covent Garden (en seis funciones a partir del 8 de mayo) bajo la batuta de Mark Elder y la dirección artística de Francesca Zambello, y tendrá como compañeros de reparto a Sondra Radvanovsky y Raymond Very.
A sus 65 años, el tenor no se siente aún con ganas de descansar y su agenda sigue siendo apretadísima: así, antes de su Cyrano, el jueves 4 de mayo, cantará en una gala londinense con motivo de los Classic Brit Awards.
En ella, Domingo recibirá el primer premio que se concede a un artista clásico por toda su carrera.
Su casa discográfica, la Deutsche Grammophon, saca además el 1 de mayo dos nuevos discos, Italia Ti Amo, una selección de sus canciones napolitanas favoritas, además de la grabación en directo de Parsifal en la Staatsoper de Viena bajo la dirección de Christian Thielemann.
Según explica Domingo, próximamente saldrán también su interpretación de Pepita Jiménez, del español Isaac Albéniz, y Edgar, la única ópera de Giacomo Puccini que le faltaba por grabar.
Pero eso no es todo, pues, según anuncia a EFE, el 2 de junio tomará la batuta para dirigir al aire libre en el palacio vienés de Schoenbrunn a la Filarmónica de esa capital en un concierto que incluirá obras de tres compositores de los que se celebran este año aniversarios: Mozart, Schostakovitch y Robert Schumann.
También se celebra el bicentenario del nacimiento de Juan Crisóstomo de Arriaga y de la muerte de Vicente Martín y Soler, y me gustaría tener algo de ellos, explica.
Con motivo del próximo Mundial de Fútbol en Alemania, Plácido Domingo cantará también con las orquestas de Múnich, la Filarmónica, la de la Ópera y la del Bayerischer Rundfunk, luego irá a Japón para hacer varias Valquirias y en junio al Teatro Real de Madrid, donde hará Luisa Fernanda, de Moreno Torroba.
El artista asegura no tener aún fecha para su retirada de los escenarios: No la veo todavía. Esa es la mejor noticia para mí, y espero que también para el público.
El tenor agrega que cada mañana, cuando se despierta, se pregunta si puede seguir cantando, por lo que cada actuación, dice, es preciosa para mí.
En cualquier caso no está preocupado por la falta de cantantes de las nuevas generaciones y así ha podido apreciar la existencia de una importante cantera durante los últimos catorce años gracias al concurso Operalia por él creado para promocionar nuevas voces.
La lista de artistas es impresionante, dice Domingo, quien cita entre ellos al mexicano Rolando Villazón: Le admiro mucho y es para mí una gran satisfacción que le comparen conmigo.