El politólogo y abogado, Belarminio Ramírez Morillo, manifestó que a pesar de que el nivel de participación popular en las elecciones se ha incrementado después de la salida del escenario de los caudillos ilustrados, el modelo de partidos políticos vigente en la República Dominicana , luce agotado, y es el momento de que las cúpulas partidarias encaren el desafío.

El profesor universitario adujo que el partido maquinaria electoral, el cuál constituye el modelo de partido vigente en la sociedad dominicana, amerita con carácter de urgencia de una serie de correctivos en procura de hacerlo más legítimo, más representativo del deseo colectivo y más eficaz frente a las demandas de la población y permanentes desafíos de esta era de la globalización.

Belarminio Ramírez expresó que la debilidad no es única y exclusivamente de los partidos mayoritarios, como arguyen algunos analistas políticos, ya que en el país sólo hay operando un modelo de partidos, que es la maquinaria electoral, y que lo incluye a todos.

Manifestó que hay dirigentes políticos que añoran la vuelta del partidismo ideológico, pero que esto no es posible, ya que los partidos ideológicos y doctrinarios sucumbieron como consecuencia directa de una transformación social que sigue en marcha. “Lo que procede es hacer más eficaces y legítimos al partido maquinaria electoral” precisó Belarminio Ramírez.

Considera que para lograr mejorar la eficacia y fortalecer la legitimidad de los partidos políticos, se deben dar tres pasos elementales. El primer paso debe estar orientado al fortalecimiento de la institucionalidad. Un marco institucional implica definir un perfil para los dirigentes en las diversas instancias de dirección, y una garantía de que las posiciones sean desempañadas por personas que encajan en ese perfil. “Además la institucionalidad implica la evaluación del desempeño de los dirigentes, lo que garantiza un crecimiento político, un ascenso que no dependa de triquiñuelas de intereses de grupos en detrimento de otros.” Puntualizó el politólogo y abogado. El segundo paso, que a su juicio deben dar los partidos políticos dominicanos, es convertirse en entidades representativas de los diversos sectores de la sociedad. Es necesario un rediseño de la acción política y social.

 “El dirigente político necesario en este momento no es el tradicional activista que se dedica a la agitación permanente a lo interno de la organización en que milita, el dirigente necesario, útil y productivo es aquel que tiene vínculos con la sociedad, con los sectores sociales del entorno en que vive y trabaja.”

Expresó que los partidos deben convertirse en promotores de la organización y activación social. Los partidos deben estimular a sus dirigentes a que se involucren de manera activa en las organizaciones sociales, no con el propósito de controlarlas para convertirlas en instrumentos de las organizaciones partidarias, sino más bien, para contribuir a la búsqueda de solución de los problemas comunitarios, hacer más efectiva la democracia, más eficiente el Estado, para avanzar hacia la democracia participativa.

l tercer paso que deben dar los partidos políticos debe estar orientado a lograr una identidad temática. “En la era de la información, en la era mediática y en la sociedad del conocimiento en que vivimos la persuasión y el convencimiento político se logra a través de los medios de comunicación, y los partidos requieren con carácter de urgencia de élites de dirigentes que sean expertos en los temas de la agenda nacional.” Dijo que los partidos deben contar con dirigentes que sean especialistas en los temas vinculados a los principales problemas de la vida nacional, para que lo envíen a los medios de comunicación en función de la agenda temática del momento.

El politólogo precisó que la ausencia de lineamientos, coordinación y planificación en este sentido, está contribuyendo a que se produzca una desconexión conceptual y emocional entre los partidos y los ciudadanos, ya que a diario los espacios de los medios de comunicación están siendo utilizados por dirigentes y voceros que se reducen a comunicar conflictos internos y luchas de intereses Belarminio Ramírez aconsejó a las cúpulas partidarias a que utilicen en la medida de lo posible como modelo al sistema de partidos vigente en los Estados Unidos, cuyas organizaciones operan como filtros sociales que permanentemente captan a las personas con liderazgo social y comunitario, así como a los líderes de opinión, a los fines de colocarlos al frente de la organización y postularlos a los puestos de elección popular.

 El escritor y profesor universitario dijo que ese es el gran secreto de la eficacia y la legitimidad de un modelo de partidos que no tiene locales, que su directiva pocas veces se reúne, y que la virtud y fortaleza de la clase política radica en que está integrada fundamentalmente por individuos que no viven de la política, los dirigentes y candidatos por lo regular son personas triunfadoras y exitosas en alguna actividad, ese es el requerimiento que exigen los partidos para postularlos y tomarlos como paradigmas.

¿Cuáles son los requisitos que están exigiendo los partidos para que una persona sea dirigente o sea candidato en la República Dominicana ? Esa es una interrogante que amerita de respuesta a la brevedad posible, si queremos que la democracia se fortalezca, que el modelo de partidos sea eficaz y que la sociedad alcance mayores de niveles de progreso y desarrollo.

El politólogo y abogado manifestó que la calidad de los líderes es el elemento esencial para que los pueblos transiten por el sendero del desarrollo y la modernidad. “En tanto, lamenta que en la República Dominicana , los partidos no se hayan encargado ni siquiera de garantizar la instalación y funcionamiento de escuelas de liderazgos.

Lamenta que en un momento histórico en que está latente el desafío de mejorar la calidad del liderazgo y de la política, las carreras de ciencias políticas hayan tenido que cerrar en las mayorías de las universidades por falta de estudiantes.”