El economista José Luis De Ramón propuso como solución a la crisis eléctrica la privatización total como primer paso de las distribuidoras de energía, que el Estado ceda al sector privado el 50 por ciento del capital que  posee en Ege Haina y Ege Itabo y, como segundo paso, la eliminación de los contratos de largo plazo con los generadores.

Asimismo, propuso que el déficit total de las distribuidoras  baje de los 810 millones de dólares registrados en 2008, a 165 millones en 2009, a 99 millones en 2010 y a 51 millones de dólares en 2011, con lo que asume que a partir de 2012 se comenzaría a registrar  superávit.

De Ramón valora en 337 millones de dólares el monto que el sector privado debía pagar  al El precio por su participación  en las distribuidoras, 1.1 millones de dólares más que en 1999, cuando por la capitalización se pagó al Estado 320 millones de dólares, y el total de desembolsos del sector privado, incluidas  las inversiones necesarias, sería de 858 millones de dólares, 2.7 millones de dólares más que en la capitalización de 2009.

El economista estima  que la venta de Ede Norte y Ede Sur rondaría  los 321 millones de dólares, monto que sugiere se pague  al Estado para que entregue sin pasivos esas empresas.

Explicó que ese  estimado del  valor parte de asumir una tasa de retorno para el inversionista de 18 por ciento anual, y asumiendo que el ingreso de las distribuidoras estará basado en un valor agregado de distribución (VAD) de sólo 3.19 centavos de dólares el kilovatio y que el monto  que deberá asumir el inversionista en esas dos distribuidoras es de 695 millones de dólares.

Además, la propuesta contempla que el adquiriente de las dos distribuidoras deberá obligarse con el Estado a invertir en distribución 651 millones de dólares, lo que sería necesario para hacerlas rentables  con un VAD de sólo 3.19 centavos de dólar por kilovatio.

Este compromiso sería asumido, so pena de los inversionistas perder su licencia de operación, si no muestran resultados económicos satisfactorios en la gestión de cobro.

En el caso de Ede Este, los inversionistas deberían invertir, bajo los mismos supuestos, 347 millones de dólares, resultando en un precio, libre de pasivos, de 351 millones de dólares, del cual el gobierno es dueño de 50%, equivalentes a 176 millones de dólares.

Pérdidas

La propuesta asume que dentro de ocho años el sistema todavía tendría pérdidas técnicas de 10 por ciento y pérdidas por fraude de 20 por ciento.

De Ramón, en su   propuesta,  en un trabajo publicado en la Revista Dominicana de Economía, dice que el índice de recuperación de efectivo (CRI) de las distribuidoras aumentaría gradualmente cada año  hasta pasar de 52 por ciento en 2008 a 72 por ciento en 2016.

Como segundo paso, plantea la compra del término o plazo de algunos contratos con los generadores, que además signifique una baja en el costo de generación.

El objetivo de su propuesta es recuperar para el mercado spot el 60 por ciento del mercado y una reducción de dos centavos de dólar por kilovatio/hora en el costo total de generación, comprando el cargo de capacidad de plantas instaladas y revocando los plazos de vigencia de los acuerdos.

De Ramón explicó que aunque se busca bajar dos centavos de dólar por kilovotio/hora el costo total de la generación, no se necesita liberar más del 60 por ciento del mercado de la cobertura de contratos para que vengan nuevos inversionistas, ya que el tiempo de instalación de nueva capacidad es largo y a la mayoría de los productores se les estarían acabando los contratos en siete años.

Al motivar su propuesta, De Ramón plantea que “con simples decisiones y abandonando el modelo estatista que hasta ahora sólo ha servido para hacer cada vez más difícil la vida para los dominicanos, tanto por la carencia de un servicio eficiente de electricidad como por el derroche del presupuesto en subsidios generalizados, el país puede encaminarse a la solución de un problema que existe porque se ha creado, por malas políticas y el zigzzagueo de objetivos, donde hoy se destruye lo construido ayer”.

Las cifras

3.19  Centavos de dólar por kilovatio.  Es el Valor Agregado de Distribución (VAD) en que se basa la propuesta de José Luis De Ramón.

72 Por ciento.  Es el Índice de Recuperación de Efectivo (CRI) que espera que se logre en 2016, de aplicarse su propuesta, tras un proceso de aumento gradual desde su nivel de 52 por ciento en 2008.

10 Por ciento.  Es el aumento  de la tarifa que contempla la propuesta sólo para el año cero, con lo cual subiría de 19.70 centavos de dólar a 21.70 centavos de dólar el KW.