Jefry Rafael Frías, de 10 años, llevaba una vida normal a pesar de su falcemia. Hace año y medio sufrió tres derrames cerebrales consecutivos que lo dejaron paralítico y posteriormente ciego. Todo sucedió horas después de que en el colegio le entregaran un diploma como estudiante meritorio de cuarto curso que había terminado.

“Yo soy estudiante meritorio en mi escuela, a mí me gustan la matemáticas, yo no camino ni veo, pero me gusta jugar con mi nintendo”, expresó entusiasmado.

Jefry Rafael participó ayer junto a otros niños y adultos discapacitados en una charla de motivación organizada por el Hospital General de la Plaza de la Salud con motivo de celebrarse el 3 de diciembre próximo el Día Internacional de las Personas con Discapacidad.