Que el gobierno se acoja a un período de gracia de 30 días para el pago de los intereses de los bonos soberanos es un elemento perjudicial desde el punto de vista empresarial, porque podría incidir en una baja en la calificación crediticia del país, advirtió ayer el empresario Ignacio Méndez.

Añadió que esta situación empeora las condiciones de crédito que les dan los suplidores internacionales a las empresas de la República Dominicana, en lo relativo a la compra de materias primas y bienes terminados.

Sostuvo que esto, a su vez, se traduce en aumento de los costos de las empresas y traería como consecuencia para el país, que cada vez más el crédito no sólo de los suplidores a los empresarios, sino a cualquier entidad que opere en República Dominicana, se le dificulte enormemente.

Méndez habló en esos términos, al referirse específicamente a la información publicadas ayer en esta sección de que la decisión del gobierno de acogerse a un período de gracia de 30 días para el pago de US$24 millones de intereses por la primera emisión de bonos soberanos, el país se ha convertido en una fuente potencial de riesgo en el mercado emergente de deuda soberana.

Ya se han producido casos de empresas que operan en el país que tenían líneas de crédito y sin tener ningún problema, las casas internacionales que las otorgaron comenzaron a cortar los créditos, dijo.

«Y para los clientes nuevos no tienen créditos disponibles, salvo que sea con cartas de crédito o con prepago», manifestó en referencia a las facilidades de financiamiento que daban empresas internacionales a entidades que operan en la República Dominicana.

Esta situación tiende a empeorar las condiciones para hacer negocios en el país, en vista de que las empresas dejan de tener los créditos de los suplidores, señaló.

La mora en el pago de los intereses de los bonos, empeora la clasificación de riesgo-país de la República Dominicana y al ocurrir esto, por ende, “se deterioran los créditos «que nos dan los suplidores».