El pleno de la Suprema Corte de Justicia (SCJ) aprobó la designación de 40 jueces de Paz egresados de la Escuela Nacional de la Judicatura (ENJ), para ocupar igual número de plazas en los distintos distritos judiciales, quienes se graduarán este jueves 3 de diciembre, luego de un programa de dos años de formación.
La decisión, adoptada conforme a lo establecido en la Constitución de la República y la Ley Núm. 327-98 de Carrera Judicial y su Reglamento, representa un avance que afianza el orden institucional respecto a la estabilidad y sostenibilidad de la carrera judicial, validando la noción de fortaleza de la justicia como garantía a la independencia, tal como expresó el magistrado Justiniano Montero Montero, miembro de la Primera Sala de la Suprema Corte de Justicia.
“La integración de los 40 jueces de paz a la Carrera Judicial representa un eje de fortaleza que debemos celebrar como un aporte a la mejora de la gestión judicial, sobre todo en la situación actual de pandemia, ya que redundan en un soporte que dinamiza el servicio judicial en cuanto a la mora, apostando a una mayor eficiencia en cuanto a las diversas materias que conocen los Juzgados de Paz”, agregó el magistrado Montero Montero.
Los jueces de paz, indica el magistrado Montero, además de sus competencias ordinarias son los suplentes de todo el espectro de la jurisdicción de Primera Instancia, en lo civil, comercial, laboral, niños, niñas y adolescentes, y en materia inmobiliaria. “Como pilar de eficiencia, indudablemente que son una ficha clave para organizar un esquema de gestión consolidado para las labores tanto administrativas como judiciales, ya que son la puerta de entrada del sistema jurídico”.
Para ser designado Juez del Poder Judicial, todo aspirante debe someterse a un concurso público de méritos mediante el sistema de ingreso a la ENJ que al efecto establezca la ley y haber aprobado satisfactoriamente el programa de formación de dicha escuela.
El programa de Formación de Aspirantes a Juez/za de Paz de la ENJ prepara a los futuros jueces y juezas de la República Dominicana, a través de un proceso integral de desarrollo de competencias judiciales, destrezas de pensamiento y habilidades de comportamiento y de gestión eficientes, para que estos profesionales sean capaces de dar respuestas a los/las usuarios/as de la justicia, conformes con los valores de un Estado Constitucional de Derecho.
Programa. En el año 2002, la Escuela Nacional de la Judicatura puso en marcha la planificación, diseño y desarrollo de un plan de estudios para facilitar el ingreso a la carrera judicial de nuevos integrantes, llamado Programa de Formación de Aspirantes a Juez de Paz, el cual ha sido implementado exitosamente y de manera ininterrumpida hasta el presente.
La fortaleza de este programa de formación ha permitido que el Ministerio de Educación Superior, Ciencia y Tecnología lo reconozca como una «Maestría en Derecho Judicial», teniendo la ENJ la calidad de Instituto Especializado de Estudios Superiores.