Agentes policiales detuvieron la mañana de ayer a una decena de personas en el Parque Independencia en medio de una subida de tensión entre nacionalistas y grupos que pretendían realizar un homenaje al afroestadounidense George Floyd, cuya muerte bajo custodia policial en Minneapolis, Estados Unidos, ha causado manifestaciones en países de todos los continentes.
Entre los detenidos figuran los organizadores del acto Ana María Belique, del movimiento Reconoci.do; Maribel Núñez, de Acción Afro-Dominicana; y Fernando Corona, del Comité Dominicano de Amistad y Solidaridad con los Pueblos; además del nacionalista Jaime Rincón, un activista y excandidato a alcalde de Guerra. Todos fueron llevados a la sede de la Dirección de Inteligencia de la Policía (Dintel), en la avenida Máximo Gómez esquina San Martín, y liberados antes del mediodía.
Tras ser puesta en libertad, Ana María Belique afirmó que la Policía permitió a los nacionalistas manifestarse, mientras que obligó a dispersarse a los que participarían en el acto de solidaridad “Una flor para Floyd”.
Durante las detenciones, los agentes del orden, encabezados por el director policial del Distrito Nacional, general Máximo Báez Aybar, justificaron el impedimento de las manifestaciones de ambos colectivos bajo el argumento de que las concentraciones en lugares públicos están prohibidas por decreto presidencial y exhortaron a mantener el distanciamiento social para frenar la expansión del coronavirus.
Algunos asistentes trataron de explicarle a los policías que solo iban a depositar flores en memoria a Floyd en el sitio donde a mediados del siglo XVI fue colgada la cabeza del dirigente antiesclavista Sebastián Lemba, pero los agentes se negaron rotundamente a permitirlo.
Los ánimos entre ambos grupos se exacerbaron hasta el punto de que llegaron a lanzarse improperios, con los nacionalistas tildando de “prohaitianos” a los que harían el homenaje y estos acusándolos de “racistas”.
Robert Cabral, coordinador del Movimiento Patriótico Nacionalista Dominicano, expresó que no se puede aceptar una “apología a la violencia racial haitiana” en el Altar de la Patria.