SANTIAGO.   Agentes de la Policía Nacional mataron  a un joven que se desplazaba en una motocicleta y no se detuvo cuando un oficial y dos alistados de la institución lo mandaron a parar en un puesto de chequeo  ubicado en la autopista Duarte, cerca del municipio de Puñal, la noche del viernes.

Osvaldo Fernández Hernández, alias “Gari”, de 19 años de edad,  murió mientras recibía atenciones médicas en el hospital José María Cabral y Báez, a causa de heridas de perdigones en la cabeza, disparados con un arma de cañón largo, a corta distancia del ojo derecho, según diagnosticó el médico forense.

La Policía informó que Fernández Hernández residía en la calle Pablo Guzmán, número 15 de Rafey, pero los moradores de ese sector dijeron que  se había mudado recientemente al barrio  Cienfuegos, junto a su madre Elsa Hernández, quien decidió trasladar el cadáver de su hijo a  Jánico, donde  será velado en la casa de la familia de su padre.

Quienes conocían a Fernández Hernández en Rafey expresaron que trabajaba como motoconchista, era una persona de trato agradable y que no estaba involucrado en hechos delictivos.

El incidente ocurrió a las 11:00 de la noche del pasado viernes cuando Fernández Hernández se aproximó al dispositivo policial, a bordo de una motocicleta marca CG-125 de color azul, en compañía de Anderson Frías Batista, conocido como “Chicho”, de 20 años, quien resultó con lesiones leves en la frente.

Eulalia Batista, madre del joven herido que acompañaba al occiso en la motocicleta, dijo que su hijo está preso en la Dirección Cibao Central de la Policía, donde sería interrogado por investigadores policiales.

“Yo pude ver a mi hijo por un breve tiempo, apenas minutos. Me habían dicho que estaba mal herido, pero gracias a Dios, sólo tiene un rasguño en la frente. Como madre estoy preocupada, porque la Policía todavía no me ha dicho nada en concreto. Mi hijo nunca había estado preso ni tiene fichas”, expresó Eulalia.

Frías Batista trabaja como motoconcho, es padre de un niño y vive en Rafey junto a su esposa. 

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Cancelan agentes

La Dirección Cibao Central de la Policía informó ayer que  el jefe de la institución, mayor general José Armando Polanco Gómez, canceló al segundo teniente Nelson Rojas Díaz, al sargento mayor Héctor Araújo y al raso Miguel Ángel Pérez, quienes integraban la unidad preventiva que dio muerte a Fernández Hernández. Polanco Gómez llamó a los policías a actuar con apego a la Constitución y a respetar los derechos humanos.