El mayor general Rafael Guillermo Guzmán Fermín dice que está en una etapa compleja de la depuración que a veces le obliga a dormir en el Palacio de la Policía para garantizar la buena marcha del proceso

En los próximos días serán intensificados en todo el país los servicios de vigilancia sobre oficiales superiores, alistados y clases de la Policía Nacional, informó ayer el jefe de la institución mayor general Rafael Guillermo Guzmán Fermín. Con este nuevo programa va a continuar el proceso de saneamiento del cuerpo del orden.

 Informó que ultima detalles con un grupo de investigadores sobre los pasos a seguir en busca de informaciones para identificar agentes en falta.

“La Policía está siendo operada quirúrgicamente, transformada con este proceso de reforma y depuración”. Pidió reconocer que el proceso que dirige tiene más valor porque no ha tenido que venir nadie de fuera a decir lo que hay que hacer.

El jefe de la Policía Nacional, mayor general Rafael Guillermo Guzmán Fermín, anunció ayer que como parte del proceso de saneamiento que realiza la institución serán intensificados en los próximos días en todo el país los servicios de vigilancia a oficiales superiores, alistados y clases.

Reveló que ultima detalles junto a los investigadores de los nuevos pasos a seguir en busca de informaciones confiables que tiendan a identificar a los agentes que cometen actos reñidos con la Ley, porque mientras esté al frente de la Policía no habrá privilegios para nadie, sin importar el rango.

Manifestó que el proceso se encuentra en una etapa tan compleja que muchas veces ha tenido que dormir en la misma institución, a fin de garantizar el buen funcionamiento de algunos casos.

Al hablar en exclusiva para este diario desde su despacho, Guzmán Fermín afirmó que aunque el proceso de depuración se encuentra en la etapa más compleja, porque es la propia institución la que ha tomado la iniciativa de sacar a los agentes corruptos, el mismo no tiene marcha atrás.

“La Policía está siendo operada quirúrgicamente, transformada con este proceso de reforma y depuración, con una institución en marcha porque es imposible que paralicemos las labores para hacer los cambios que  requiere la sociedad”, aseguró el jefe policial, mayor general  Rafael Gillermo Guzmán Fermín.

Consideró que el proceso tiene más valor porque no se ha tenido que esperar que desde fuera  vengan a decir lo que hay que hacer para sanear la institución.

Destacó la visión del presidente Leonel Fernández de pensar en tener en el país  una Policía moderna y acorde con los nuevos tiempos.

Dijo que, además de sacar de las filas a las “lacras”, el proceso de saneamiento contempla la re adecuación de la formación académica de los agentes, en especial de los oficiales superiores, los que están siendo sometidos a un proceso de formación académica.

Las claves

1. Rigurosidad

El jefe de la Policía afirmó que, como parte del proceso de depuración que realiza, el ingreso de nuevos agentes será más riguroso.

2.  Efectividad

Guzmán Fermín afirmó que los niveles de efectividad en la solución de los casos resueltos  fueron aumentados en menos de un año  de 17 a 54%, superando así  la media internacional que oscila entre un 34 a 40%.

3.  Vigilancia

Dijo que como forma de garantizar una mayor protección en las calles aumentó de 2,800 a 15,000 el número de agentes.